El sistema público de escuelas en el condado de Miami-Dade, del que son parte más de 350 estudiantes, pudiera dejar de exigir el uso obligatorio de máscaras en los próximos diez días, según indicó el superintendente Alberto Carvalho. La decisión se debe a que en el condado hay menos casos de nuevos contagios, las hospitalizaciones han disminuido y la mayor parte de los alumnos y empleados de escuelas en edad de recibir la vacuna tienen colocada al menos una dosis.
Reunido con los miembros de la junta escolar, Carvalho afirmó que el anuncio formal pudiera darse hacia finales de semana o comienzos de la semana próxima. Los viernes el departamento de salud entrega los datos de COVID de la semana. Basado en esa información, el sistema de escuelas consultará con el panel de expertos que conformaron a comienzos de la pandemia, y se tomará una decisión definitiva.
“Esto nos permitirá, con el consejo del comité asesor pasar de una política de uso obligatorio de máscaras, con salvedades médicas o de estudiantes con condiciones particulares de educación, a una política de uso obligatorio de máscaras con la posibilidad de que los padres opten por que sus hijos no adhieran a esa política sin necesidad de tener una justificación”, explicaba Carvalho.
La idea original del distrito era que el uso de máscaras fuera opcional, tal como ocurre en la mayor parte del estado de la Florida y como quiere que sea el gobernador Ron DeSantis. Sin embargo, semanas antes de que comenzara este ciclo lectivo (que fue a finales de agosto), se tomó la decisión de que el uso de máscaras fuera obligatorio debido al nuevo pico de contagios generado por la variante Delta durante el verano boreal.
Cuando se anunció la medida, junto con la decisión de que se le pediría cuarentena a todos aquellos que se hayan visto directamente expuestos al virus, Carvalho prometió que revisarían la medida semana a semana, y que la política cambiaría dependiendo de la evolución del virus en esta comunidad.
“Tenemos índices de positividad menor que en otras comunidades de nuestros alrededores. Nunca hemos tenido un número de estudiantes en cuarentena alto. Otros distritos, mucho menores que el nuestro, han llegado a tener hasta el 19 por ciento de sus estudiantes en cuarentena. Nosotros jamás tuvimos cifras tan altas”, agregaba acerca de los logros de su distrito el superintendente Carvalho, al frente del cuarto distrito escolar más grande del país.
La semana pasada el distrito batió el récord más bajo en el número de estudiantes en cuarentena, con un total de mil estudiantes quedándose en sus casas por exposición al virus.
El criterio, desde un comienzo, ha sido que las restricciones deberían flexibilizarse una vez que el promedio de casos semanales fuera menor a 100 casos cada 100 mil habitantes. La semana pasada el condado estuvo cerca de lograr esa métrica y se espera que esta semana los números mejoren.
La segunda métrica que se estaba esperando es que el 80 por ciento de la población escolar que puede vacunarse haya recibido al menos una dosis de la vacuna. Esto se logró ya, y el 60 por ciento de quienes pueden vacunarse ya tienen las dos dosis colocadas.
Por último, el distrito escolar quería ver que las hospitalizaciones a la semana estuvieran por debajo de las 100. Los hospitales de Miami Dade ya llevan más de dos semanas reportando menos de 100 casos por semana.