Estados Unidos superó este martes los 600.000 muertos por COVID-19, una cifra que llega en un momento de optimismo por la menor incidencia del virus y los avances en la campaña de vacunación, según el recuento independiente de la Universidad Johns Hopkins.
El presidente Joe Biden lamentó el último “triste hito” e instó a los estadounidenses a vacunarse: “Todavía se están perdiendo demasiadas vidas”, dijo Biden.
“Tenemos más trabajo por hacer para combatir este virus. Y ahora no es el momento de bajar la guardia. Por favor, vacúnese lo antes posible”, pidió el mandatario demócrata.
A las 13:00 horas del martes (17:00 GMT), el contador de la universidad registraba un total de 600.012 fallecimientos por el virus desde que empezó la pandemia en Estados Unidos, el país que más muertes ha registrado por COVID-19 del mundo.
El número de contagios asciende a casi 33,5 millones, también la cifra más alta del mundo, seguida por la India y Brasil.
El sombrío hito se alcanza en un momento de optimismo por los grandes avances en la campaña de vacunación, aunque una parte importante del país sigue resistiéndose a la inmunización, entre ellos los más jóvenes.
El 54,4% del total de la población adulta de EEUU (más de 140 millones de personas) está ya completamente vacunado, y el 64,5 % (166,5 millones) ha recibido al menos una dosis, de acuerdo al conteo de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés).
El presidente estadounidense, Joe Biden, se puso como meta que el 4 de julio, fecha en la que se celebra la festividad del Día de la Independencia, el 70% de los adultos hayan sido inoculados con al menos una dosis de las vacunas.
No obstante, las autoridades reconocen la preocupación para alcanzar ese objetivo ante la ralentización en las inoculaciones en las últimas semanas, ya que la media diaria ha caído a apenas un millón de dosis frente a los más de 3 millones administradas a finales de abril.
La campaña de vacunación presenta además una gran disparidad por regiones: mientras que estados como Massachusetts, Connecticut y Nueva Jersey tienen ya a más de dos tercios de su población completamente vacunada, otros como Alabama, Georgia y Luisiana solo han inmunizado por completo a poco más de un tercio.
Sin embargo, la situación epidemiológica sigue mejorando, y la media de casos de COVID-19 de los últimos 14 días estaba el domingo en 14.288, la más baja en más de un año; mientras que los fallecidos fueron 363, la menor desde marzo de 2020.
Con información de EFE y AFP
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