El presidente Joe Biden pidió el martes que el veredicto sea “correcto” en el juicio de Derek Chauvin, el ex policía acusado de asesinar a George Floyd, y calificó las pruebas de “abrumadoras”.
“Estoy rezando para que el veredicto sea el correcto. Las pruebas, en mi opinión, son abrumadoras”, dijo Biden a los periodistas. Tambén, aclaró que sólo hablaba abiertamente porque el jurado ha sido aislado en un hotel y está incomunicado mientras delibera.
Biden también dijo que ha hablado con la familia de Floyd, cuya muerte en mayo de 2020 dio la vuelta al mundo gracias a un video que mostraba cómo Chauvin le presionaba el cuello con su rodilla durante más de 9 minutos. El presidente añadió que no puede ni “imaginar la presión y la ansiedad que sienten” los familiares de Floyd, y subrayó que ellos “están pidiendo que haya paz y tranquilidad, sea cual sea el veredicto”.
La inquietud fuera del juzgado se palpa en las calles de Minneapolis, sitiada por la presencia de miles de soldados de la Guardia Nacional estadounidense y otros cuerpos de seguridad, a la espera del resultado. La recta final de este juicio llega en un contexto de creciente tensión en el país tras la muerte por disparos de policías del afroamericano Daunte Wright, de 20 años, en Brooklyn Center (Minesota) y de Adam Toledo, de 13 años, en Chicago, ocurridos ambos en las últimas semanas.
El lunes, la Fiscalía del estado de Minnesota y la defensa de Chauvin expusieron sus alegatos finales durante unas cuatro horas frente al jurado, que deberá debatir a partir de ahora el caso y llegar a un veredicto por unanimidad. Tras escuchar los argumentos de ambos lados y las instrucciones que les ha dado el juez para su deliberación, los miembros del jurado, seis personas blancas y seis personas negras o de otras razas, se aislaron y encerraron en un hotel para repasar todas las pruebas presentadas en el juicio y llegar a una sentencia.
El juez, Peter Cahill, recordó a los miembros del jurado la necesaria unanimidad de su veredicto y les pidió que lo basen únicamente en las pruebas presentadas en el juicio. “Deben ser absolutamente justos”, les dijo Cahill.
El jurado delibera si Chauvin es culpable o no de los tres cargos que enfrenta: asesinato en segundo grado, penado con hasta 40 años de cárcel; asesinato en tercer grado, con una condena máxima de 25 años, y homicidio culposo en segundo grado, que acarrea hasta 10 años de privación de libertad. No obstante, como no tiene antecedentes penales, solo podría ser condenado a un máximo de 12 años y medio de prisión por los primeros dos cargos y a 4 años de cárcel por el tercero.
(Con información de AFP y EFE)
SEGUIR LEYENDO: