El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, mandó este viernes un mensaje con sus condolencias a la nación luego de que superara la lúgubre barrera simbólica de medio millón de muertes por COVID-19.
A través de su cuenta de Twitter, el mandatario expresó: “500.000 vidas perdidas ante el COVID-19. Es un número inconmensurable, pero cada uno representa una familia que nunca más volverá a estar completa. A quienes han perdido seres queridos: sé que no hay palabras que puedan mitigar el dolor, pero espero que encuentren algún consuelo al saber que la nación está de luto con ustedes”.
La administración demócrata también ordenó que las banderas ondeen a media asta para conmemorar y honrar a quienes fallecieron como consecuencia de la enfermedad.
Pocos minutos después de las 6 PM (hora del Este de los Estados Unidos), Biden pronunció un mensaje televisado al respecto. “Para sanar tenemos que recordar a quienes no están, así es como uno sana. Y es importante que lo hagamos como una nación”, comenzó.
Luego, en una velada referencia a las pérdidas que él ha sufrido a lo largo de su vida -su primera esposa y su hija murieron en 1972 y su hijo Beau en 2015- detalló: “A quienes han perdido seres queridos, esto es lo que sé: siempre van a ser parte de su corazón. Ellos nunca se van por completo. Llegará el momento en el que el recuerdo de alguien les saque una sonrisa antes que una lágrima. Ahí sabrán que están bien”.
El mandatario cerró su mensaje con un nuevo llamado al uso de mascarillas, el mantenimiento de la distancia social y a vacunarse. “Esto no es un asunto político, tenemos que luchar contra esto como un pueblo unido, es la única manera de evitar más dolor y más pérdida”, concluyó.
Luego de pronunciar el mensaje, Biden lideró junto a su esposa Jill, la vicepresidenta Kamala Harris y su esposo Doug Emhoff una ceremonia de encendido de velas, también como manera de honrar a las víctimas.
El principal especialista en enfermedades contagiosas de Estados Unidos, Anthony Fauci, se había pronunciado al respecto durante la mañana. “Medio millón de muertos es algo terrible. Es histórico. No hemos visto nada igual desde la gripe de 1918”, dijo en una entrevista con la cadena NBC.
Además, el ritmo de las vacunas va en aumento, con más de 61 millones de dosis administradas hasta el momento, según un recuento estado por estado. Las cifras muestran que el 5,7 por ciento de los estadounidenses ya recibieron las dos dosis correspondientes.
No obstante, según las previsiones de Fauci, entre el 70 y el 85 por ciento de la población de Estados Unidos debería recibir la vacuna para que la inmunidad colectiva sea efectiva.
Ante esta bajada en la incidencia del virus, algunas autoridades estatales han decidido relajar algunas de las restricciones en vigencia, ante lo que los expertos ya han alertado, especialmente por el peligro de la propagación de las nuevas cepas de la COVID-19, más contagiosas.
Estados Unidos sigue siendo el país más golpeado por la pandemia del mundo, seguido por India en el número de casos, que acumula 10.991.651 contagiados, y por Brasil en el número de víctimas mortales, que suma 246.504.
Más sobre este tema: