La Comisión Electoral de Wisconsin ha señalado este lunes que un nuevo recuento de las papeletas en ese estado costaría a la campaña del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, unos 7,9 millones de dólares, después de que los resultados no oficiales le hayan dado el triunfo al demócrata Joe Biden.
Hasta el momento, según las proyecciones de la cadena estadounidense CNN, el presidente electo, Joe Biden, se impondría por un margen mínimo a Trump en Wisconsin, y con ello obtendría otros diez votos electorales.
Según resultados no oficiales, Biden habría obtenido el 49,6 por ciento de los sufragios, lo que significa 20.470 votos más que Trump, que se quedaría con el 48,9 por ciento.
El precio que ha fijado la comisión es cuatro veces más alto que el de hace cuatro años, cuando el recuento costó dos millones de dólares (1,6 millones de euros).
La principal responsable de la comisión, Meagan Wolfe, ha explicado que en esta ocasión se han tenido en cuenta “factores que no estaban presentes hace cuatro años”, como las medidas de seguridad necesarias para evitar más casos de coronavirus, en un estado en el que se han registrado unos 330.000 contagios y más de 2.750 fallecidos.
“Estas estimaciones son significativamente más altas que los costes del recuento de 2016, pero se tienen en cuenta factores que no estaban presentes hace cuatro años, como la necesidad de espacios más grandes para permitir el distanciamiento social, la seguridad de esos espacios”, así como “el alquiler de equipos de alta velocidad para digitalizar las papeletas”.
Debido a que el ajustado resultado da la victoria a Biden por encima del 0,25 por ciento, en caso de que el equipo de campaña de Trump pretenda un recuento, deberá abonar esos 6,6 millones de euros por adelantado, tal y como señala la ley electoral del estado.
El equipo de campaña del todavía presidente Trump tiene hasta este miércoles a las 17:00 hora local para presentar su solicitud y hacer el pago, puesto que el recuento debería realizarse antes del primero de diciembre, tal y como contempla también la legislación del estado, para que la Comisión Electoral de Wisconsin pueda contar con margen para avalar los resultados.
No obstante, Wolfe ha señalado que “todavía” no han recibido “ninguna indicación de si habrá o no un recuento” de manera oficial, pese a que desde el principio la campaña de Trump anunció que presentaría un recuento para que las papeletas volvieran a ser contadas, después de lanzar teorías de la conspiración, denunciando, sin pruebas, supuestas irregularidades.
Hasta el momento ningún tribunal ni autoridad electoral, entre ellos republicanos responsables de la supervisión del recuento, ha validado estas acusaciones, que Trump ha vuelto a lanzar a través de sus redes sociales en las últimas horas.
Trump se ha mostrado muy activo este fin de semana en su cuenta de Twitter e insistió otra vez en que él es el vencedor de las presidenciales, acusando a los medios de “ascender” a la Presidencia antes de tiempo a Joe Biden, quien “ganó porque las elecciones estaban amañadas”.
“No había supervisores ni observadores”, escribió el domingo Trump en su cuenta de Twitter, en un mensaje en el que acusó a la compañía Dominion, “propiedad de la izquierda radical”, de suministrar “engañosos” equipos de recuento de votos con la complicidad de “los falsos y mudos medios de comunicación”.
“Todos los ‘errores’ mecánicos ocurridos en la Noche Electoral eran, en realidad, demócratas a los que pillaron mientras intentaban robar votos. Pero aquellos a quienes no cogieron tuvieron mucho éxito. Las elecciones por correo son un chiste enfermo”, escribió.
Con información de Europa Press
MÁS SOBRE ESTE TEMA: