El jefe republicano del Senado de Estados Unidos dijo que organizará una votación en la cámara alta del Congreso si el presidente Donald Trump nombra antes de la elección del 3 de noviembre al sucesor de la magistrada de la Corte Suprema Ruth Bader Ginsburg, fallecida el viernes.
Su muerte abre inmediatamente una batalla por el asiento que deja vacante: Trump probablemente busque nominar a un nuevo magistrado antes de los comicios presidenciales y su oponente, el candidato demócrata Joe Biden, insista en que sea el ganador de las elecciones el que elija a un sucesor.
“Nosotros prometimos trabajar con el presidente Trump y apoyar su programa, especialmente sus notables selecciones para los puestos de jueces federales”, declaró el jefe del Senado, Mitch McConnell, en un comunicado.
“Una vez más, mantendremos nuestra promesa. El candidato del presidente Trump tendrá derecho a una votación en la sede del Senado”, dijo.
Esta jugada sería inédita en la historia moderna y ciertamente enfadará a los demócratas, que ya se apresuraron a pedir a McConnell que espere para llevar una nominación a consideración del Senado al menos hasta enero, cuando el control de la Casa Blanca y de la cámara alta podría cambiar.
“Los votantes deben escoger un presidente y el presidente debe escoger a un magistrado para consideración del Senado”, dijo Biden a periodistas tras la muerte de la jueza de 87 años.
“Esta fue la decisión que el Senado republicano tomó en 2016 cuando faltaban casi 10 meses para la elección. Esta es la posición que el Senado de Estados Unidos debe tomar hoy”, añadió.
Biden se refería a la negativa de McConnell en febrero de 2016 de presentar un nominado de Barack Obama a votación del Senado para reemplazar al fallecido juez Anthony Scalia -250 días antes de la elección presidencial de ese año y bajo la premisa de que la fecha de los comicios era muy cercana.
La histórica jueza de la Corte Suprema de los Estados Unidos, Ruth Bader Ginsburg, murió este viernes a los 87 años. En un comunicado, el máximo tribunal indicó que estaba “rodeada por su familia en su casa de Washington DC” y que su deceso fue consecuencia de un cáncer pancreático.
Ginsburg, quien se convirtió en un ícono cultural por sus posturas progresistas -especialmente en materia de género- ocupó una de las nueve bancas de la Corte Suprema estadounidense por más de 27 años. Fue la segunda mujer en llegar a ocupar un puesto de esa jerarquía.
“Nuestra nación ha perdido una jurista de magnitud histórica. En la Corte Suprema perdimos una valiosa colega. Hoy estamos de luto, pero con la confianza de que generaciones futuras recordarán a Ruth Bader Ginsburg como la conocíamos - una incansable y resuelta defensora de la Justicia”, expresó el presidente del tribunal, el juez John Roberts.
MÁS SOBRE ESTOS TEMAS: