Isaías se debilitó a tormenta tropical en su camino hacia Florida, informó este sábado el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC), con sede en Miami.
Más temprano pasó sobre el archipiélago caribeño de las Bahamas como un huracán y se espera que vuelva a convertirse en uno en la noche a medida que se acerca a la costa de Florida.
“Empezaremos a ver impactos esta noche”, advirtió el gobernador de Florida Ron DeSantis durante una conferencia de prensa. “No se dejen engañar por la baja de categoría”.
Las autoridades de Florida cerraron las playas, parques y sitios de pruebas de virus, amarrando señales a las palmeras para que no se volaran. El gobernador dijo que el estado está anticipando cortes de energía y pidió a los residentes que tengan a mano el suministro de agua, alimentos y medicinas para una semana.
Los funcionarios se esforzaron por preparar sitios donde la gente pueda refugiarse de la tormenta si es necesario, mientras se tome distancia social de forma segura para evitar la propagación del virus.
Las autoridades de Carolina del Norte ordenaron la evacuación de la isla de Ocracoke, que fue azotada por el huracán Dorian el año pasado. Mientras tanto, las autoridades de las Bahamas abrieron refugios para la gente de la isla de Abaco para ayudar a quienes han estado viviendo en estructuras temporales desde que Dorian devastó la zona, matando al menos a 70 personas.
Los vientos máximos sostenidos de la tormenta disminuyeron constantemente durante el sábado, y estaban cerca de 70 millas por hora (110 kilómetros por hora) a las 5 p.m., cuando el Centro Nacional de Huracanes de EEUU lo bajó de categoría. Pero la agencia dijo que se espera que aumente su fuerza durante la noche cuando se dirija sobre aguas cálidas hacia Florida.
Se pronostica que el centro de la tormenta se acercará a la costa sureste de Florida el domingo por la mañana temprano y luego viajará a lo largo de la costa este del estado durante todo el día. Se espera que siga siendo un huracán hasta el lunes y que se debilite lentamente a medida que sube por el Atlántico. Lluvias, inundaciones y fuertes vientos podrían azotar gran parte de la costa este en la semana.
Isaías ya ha sido destructivo en el Caribe: el jueves, antes de que se convirtiera en huracán, arrancó árboles, destruyó cosechas y hogares y causó amplias inundaciones y pequeños deslizamientos de tierra en la República Dominicana y Puerto Rico. Un hombre murió en la República Dominicana. En Puerto Rico, la Guardia Nacional rescató al menos a 35 personas de las inundaciones que arrastraron a una mujer, cuyo cuerpo fue recuperado el sábado.
Con información de AFP y AP
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