Ex presidentes y congresistas norteamericanos participaron este jueves del servicio fúnebre del histórico dirigente afroamericano y legislador demócrata John Lewis, quien murió el pasado viernes de cáncer a los 80 años. El evento, realizado desde las 11 de la mañana (hora local) en Atlanta, Georgia, termina seis días de conmemoraciones a la larga trayectoria de Lewis, ícono de los derechos civiles.
Barack Obama, Bill Clinton, George W. Bush y Nancy Pelosi, entre otros, fueron las personalidades más destacadas que se pronunciaron en el funeral privado, que tuvo lugar en la histórica Iglesia Bautista Ebenezer, que una vez dirigió el reverendo Martin Luther King Jr.
Los restos de Lewis serán enterrados en el cementerio de South View, en Atlanta, por la tarde.
“Honrémoslo revitalizando la ley por la que estaba dispuesto a morir”, sostuvo Obama, quien elogió el activismo de Lewis e instó a los norteamericanos a continuar su legado exigiendo una nueva legislación sobre el derecho al voto. En ese sentido, exhortó al Congreso a que apruebe reformas que permitan el voto de los criminales, hacer del día de las elecciones un feriado federal e implementar el registro automático de votantes.
También hizo referencia a la “injusticia” que ve en estos tiempos en el país, aludiendo a la muerte de George Floyd y a la respuesta del Gobierno contra las manifestaciones que se produjeron tras la muerte del afroamericano a manos de la policía. “Hoy presenciamos con nuestros propios ojos a los agentes de policía arrodillados en el cuello de los negros americanos (...) George Wallace (ex gobernador de Alabama, conocido por sus posturas racistas) puede haber desaparecido, pero podemos ser testigos del envío de agentes de nuestro gobierno federal con gas lacrimógeno y porras contra los manifestantes pacíficos”.
“Hay quienes están en el poder que están haciendo todo lo posible para desalentar a la gente a votar”, agregó.
El ex presidente norteamericano dijo que Lewis sabía que “mantener la democracia no es algo que suceda automáticamente; hay que alimentarla, hay que cuidarla”. “Yo, como muchos estadounidenses, tengo una gran deuda con John Lewis y su enérgica visión de la libertad”.
También recordó la época de Lewis como activista por los derechos civiles. “John sólo tenía 20 años, pero empujó todos esos 20 años al centro de la mesa, apostando todo” para desafiar a toda la infraestructura de la sociedad.
Por su parte, Obama consideró que cuando Estados Unidos alcance una unión perfecta, Lewis será considerado el padre fundador de esa “América más plena, más justa y mejor”: “Era un hombre bueno, amable y gentil. Y creía en nosotros. Incluso cuando no creíamos en nosotros mismos. Qué regalo fue John Lewis. Todos somos muy afortunados de haberlo tenido con nosotros por un tiempo, y nos mostró el camino”.
En su intervención, el ex presidente Bill Clinton recordó la humanidad de Lewis: “Es importante que todos los que lo amamos recordemos que él era, después de todo, un ser humano”.
Lewis “estaba aquí en una misión” para defender los derechos civiles, apuntó Clinton, y afirmó que “nos dejó con órdenes en marcha” en su artículo de opinión en el New York Times, publicado el día de su funeral. En el artículo, el congresista demócrata instó a los estadounidenses a seguir metiéndose en “buenos problemas”. El ex presidente sugirió que los americanos honren esta petición: “Saluden, vístanse y marchen”.
George W. Bush también participó del servicio fúnebre para rendir homenaje a Lewis. El ex presidente consideró que los norteamericanos hoy en día viven en un país mejor gracias a personalidades como las de Lewis y “su fe permanente en el poder de Dios, en el poder de la democracia y en el poder del amor para elevarnos a todos a un terreno más alto”.
Lewis “vivirá para siempre en el corazón de los americanos que actúan con justicia, aman la misericordia y caminan humildemente con su Dios”, añadió.
“John Lewis siempre miraba hacia afuera, no hacia adentro. Siempre pensaba en los demás. Siempre creyó en la predicación del evangelio, de palabra y de hecho, insistiendo en que el odio y el miedo debían ser respondidos con amor y esperanza”, manifestó Bush.
Nancy Pelosi, líder de los demócratas en el Congreso de Estados Unidos, recordó: “Cuando él hablaba, la gente escuchaba. Cuando él dirigía, la gente lo seguía. Lo queríamos mucho (...) Nos despedimos de esta persona, nuestro líder, nuestro amigo”.
La demócrata de California destacó que 50 miembros del Congreso asistieron para honrar la vida de Lewis, y pidió a esos legisladores que se pusieran de pie, y aseveró que el legislador “quería que viéramos el movimiento de los derechos civiles y el resto a través de sus ojos”. “Siempre supimos que trabajaba del lado de los ángeles, y ahora está con ellos. Que descanse en paz”, concluyó.
Bernice King, hija de Martin Luther King Jr., alabó el legado de Lewis y pidió a los estadounidenses que continuaran su lucha por la justicia. En línea con el pedido de Obama, solicitó al Congreso que reforzara el derecho al voto, invocando la lucha de Lewis por la aprobación de la Ley de Derecho al Voto en la década de 1960.
MÁS SOBRE ESTE TEMA: