El avispón asesino amenaza a EEUU: qué probabilidad hay de que se extienda por todo el país

A finales de 2019, la llegada de un insecto letal a EEUU alarmó a la comunidad científica. Por primera vez, apicultores del estado de Washington habían observado vespas mandarinas merodeando por sus colmenas de abejas. La especie, procedente de Asia, y conocida como avispón asesino, nunca se había detectado en Norteamérica.

La preocupación fue aún mayor porque Canadá ya había lanzado otro aviso. En White Rock, la Columbia Británica, también habían aparecido estos avispones gigantes, de más de cinco centímetros de longitud y siete de envergadura.

Desde entonces, el riesgo de que la vespa mandarina se extienda por el continente, ha infundido el terror en la comunidad científica. Un miedo que comparten también los apicultores y expertos de la costa este, quienes consideran que la expansión del insecto por el territorio estadounidense es inevitable.

"Podrían pasar años antes de que se establezcan [en la costa este], o podrían terminar en la parte trasera del camión de alguien, y estar aquí en cuatro días”, dijo en declaraciones a New York Post el apicultor de Manhattan, Andrew Cote.

La primera vez que Cote vio una vespa mandarina fue en 2017, durante un viaje a China. Entonces vio cómo los apicultores locales utilizaban “pequeños bates que parecían bates de cricket en miniatura”, para golpear a los avispones en el aire.

“Sonaba como si alguien golpeara una roca. Los avispones son extraordinariamente agresivos”, contó.

Aunque los expertos no pueden asegurar cómo arribó la especie a EEUU, creen que es posible que haya viajado a bordo de un barco desde el este de Asia. A pesar de la campaña a gran escala que emprendieron científicos del estado de Washington y White Rock para erradicar al animal, Cote opina que la vespa mandarina “llegó para quedarse".

“Puede que lleguen a estar en todas partes del continente al mismo tiempo. Es un hecho", explicó. “No hay forma de retenerlas en la costa oeste”.

En realidad, la preocupación que ha generado la irrupción de este insecto en Norteamérica no se debe únicamente a su poderoso veneno, que mata cada año a alrededor de 50 personas, sino también, al riesgo que supone para las colmenas de abejas melíferas.

"Puede diezmar una colonia de abejas porque necesita acumular proteínas para su propia colonia, por lo que decapita y consume parte de la abeja melífera”, relató Cote.

A menudo, los avispones asesinos vuelan en grupo para atacar una colmena de abejas. Con sus fuertes mandíbulas, arrancan la cabeza a las productoras de miel, y la desechan. Después, conservan el cuerpo de su víctima como alimento.

“La posibilidad de que mis abejas semi-indefensas tengan que enfrentarles me provoca escalofríos”, dijo el experto de Manhattan.

Anthony Planakis, apicultor jubilado del Departamento de Policía de Nueva York, coincide con Andrew Cote. Él cree que los avispones gigantes asiáticos irrumpirán en la costa este en los próximos dos o tres años. Y según explicó, aparecerán en las zonas verdes de los distritos exteriores de las ciudades.

“Todo lo que se necesita son unos avispones, y tienes una colonia”, dijo Planakis en declaraciones a New York Post.

En el caso de que se produjera una futura e hipotética infiltración del avispón en Nueva York, el ex agente cree que podrían asentarse en lugares como el Jardín Botánico del Bronx, porque se trata de un espacio abierto donde hay mucha comida. Aclaró que siempre evitarán las zonas asfaltadas, porque tienden a anidar en el suelo y a excarvar en la madera podrida.

Conocido en la Policía de Nueva York como “Tony Bees” [Tony Abejas], el apicultor aseguró que el avispón es muy peligroso para el ser humano, y advirtió que al cruzarse con un insecto como ese, lo peor que uno puede hacer es matarlo.

“[En su veneno] hay una feromona que es como un imán para otros avispones. Así que puedes ser atacado por un enjambre solo por ser picado por uno", alertó. “Lo peor que cualquiera puede hacer con estas cosas es matarlas. Ese aroma va a estar en el aire, y el resto de la colmena vendrá”.

Planakis advirtió además que la picadura de la vespa mandarina es “extremadamente dolorosa”.

“Y no te pican una vez. Tienen la capacidad de picarte varias veces. Las abejas melíferas solo pueden picarte una vez, y luego mueren”, dijo Planakis. “Cualquiera que sea alérgico, que el cielo lo ayude”.

Además, agregó Andrew Cote, no utilizan su aguijón únicamente para defenderse de los humanos, sino que al ser animales carnívoros, también utilizan su veneno para atacar pájaros, o roedores.

“Verás la punta del aguijón, pero hasta que extiende el aguijón realmente no entra en la piel. Y son carnívoros. Irán tras pájaros, como pequeños gorriones si es necesario”, detalló.

En cualquier caso, explica el ex agente de Nueva York, el avispón gigante solo utilizará su picadura si cree que peligra su vida.

“Tienes que entender que en la naturaleza, a menos que vayas a su colmena, no te buscarán. Debe haber una razón para que te ataquen”, dijo Planakis.

Maryland, Carolina del Norte y Arizona

Desde que apareció la vespa mandarina en la costa oeste, autoridades de otros estados activaron un monitoreo para vigilar el avance del insecto. A pesar de ello, a diferencia de los expertos de Nueva York, algunos entomólogos consideran que es poco probable que el avispón se mueva hacia el este del país.

“Hemos recibido numerosas llamadas hoy acerca del avispón gigante asiático, al que se refieren en las portadas de los medios de comunicación como ‘avispón asesino’", escribió en un comunicado el Departamento de Agricultura del estado de Maryland. “Este insecto fue visto en Washington a finales de 2019. Nosotros continuamos monitoreando, a pesar de que es altamente improbable que el avispón esté presente en Maryland”, añadió.

Mientras, en Carolina del Norte, El Departamento de Agricultura y Servicios al Consumidor, tranquilizó a la población y les aseguró que si el avispón asiático estuviera en el territorio, ya lo sabrían.

Según explicó en declaraciones a la cadena WXII la entomóloga de la agencia estatal, Whitney Swink, se ha animado a los habitantes a “permanecer alerta e informar de posibles avistamientos de la plaga”, aunque aclaró que a menudo los ciudadanos confunden a este insecto con la avispa asesina de cigarras y el avispón europeo.

Por su parte, entomólogos de la Universidad de Arizona aseguraron que en ese estado no hay que preocuparse por enjambres de avispones asesinos.

“Estos avispones no se han visto aquí y no estamos seguros de si estos avispones encontrarían nuestro clima amenazador”, dijo Katy Prudic, profesora asistente en la Escuela de Recursos Naturales y Medio Ambiente de la universidad. “Y en el noroeste del Pacífico quedará por verse si estos avispones establecen colonias permanentes, se reproducen y se multiplican”, añadió.

A pesar de estas consideraciones, los expertos de los diferentes estados coinciden en que es necesario exterminar a esta especie en América Latina.

“Deberíamos estar lo suficientemente preocupados como para hacer todo lo posible para mantener estos avispones bajo control y exterminarlos en Norteamérica”, sentenció la profesora de entomología de la Facultad de Agricultura y Ciencias de la Vida de la Universidad de Arizona, Wendy Moore.

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