El Pentágono anunció el jueves que desviará 3.800 millones de dólares adicionales para construir el muro con México, al tiempo que el presidente Donald Trump prorrogó otro año su declaración de “emergencia nacional” por el flujo de migrantes y drogas en la frontera sur.
Con esta cifra, ya son 9.900 millones de dólares los fondos reasignados por el Departamento de Defensa en los últimos dos años para erigir esa barrera, un proyecto insignia de Trump que el Congreso se ha negado a financiar.
Un alto funcionario del Pentágono dijo que el secretario de Defensa, Mark Esper, aprobó la reasignación de fondos para construir 285 km de la estructura de concreto y acero prevista por Trump, que ganó en 2016 con esa promesa y ahora busca renovar su mandato en noviembre.
“El apoyo en la construcción de la barrera fronteriza que el Departamento de Defensa brindará al Departamento de Seguridad Interior (DHS) este año permitirá que el DHS cumpla la promesa de seguridad fronteriza del presidente”, dijo el subsecretario adjunto de Defensa Robert Salesses.
El funcionario dijo que el Cuerpo de Ingenieros “está listo” para edificar la cerca, que se erigirá en seis sectores de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP): San Diego, El Centro, Yuma, Tucson, El Paso y Del Río.
En documentos enviados al Congreso, el Pentágono especificó que se transferirán hasta 2.200 millones de dólares de líneas de su presupuesto 2020, destinados anteriormente a la compra de equipos para la Fuerza Aérea y la Marina. El resto provendrá de fondos inicialmente previstos para operaciones externas del ejército estadounidense (en Afganistán, Siria, Irak).
Entre el equipamiento militar sacrificado por el muro, aparecen aviones caza F-35, drones armados MQ-9 “Reaper”, aviones de carga C-130J y aviones de reconocimiento marítimo “Poseidón” P-8.
Salesses señaló que es posible que también se le pida al Pentágono que desvíe dinero de sus propios proyectos de construcción este año para destinarlo al muro fronterizo. “Estoy al tanto de las discusiones en curso, pero no se han tomado decisiones”, dijo.
“Emergencia nacional”
El presupuesto de Defensa, que supera los 700.000 millones de dólares al año, se asigna a programas estrictamente definidos por el Congreso a sugerencia del Ejecutivo.
Pero el Pentágono cuenta con unos 6.000 millones de dólares en fondos discrecionales, que pueden redirigirse siempre que se gasten en programas “urgentes”.
Justamente el mismo jueves, la Casa Blanca renovó hasta febrero de 2021 la declaración de emergencia nacional en la frontera sur, que había justificado el año pasado las transferencias de fondos asignadas anteriormente al Pentágono para el muro.
“La actual crisis de seguridad fronteriza y humanitaria en la frontera sur de Estados Unidos continúa amenazando nuestra seguridad nacional”, indicó el decreto.
“Se necesitan más medidas para abordar la crisis humanitaria y controlar la migración ilegal y el flujo de narcóticos y delincuentes a través de la frontera sur de Estados Unidos”, añadió.
Casi un millón de personas fueron detenidas en el año fiscal 2019, cerrado el 30 de septiembre, por intentar ingresar a territorio estadounidense a través del límite sur, la gran mayoría centroamericanos huyendo de la pobreza y la violencia, una cifra que no se registraba desde 2006.
Pero esta oleada migratoria, que provocó una crisis humanitaria con centros de recepción superpoblados y condiciones sanitarias deplorables, tuvo una fuerte disminución tras duras medidas antiinmigración tomadas por la administración Trump: el mes pasado, la cifra de detenciones fue de menos de 37.000.
“Muro xenófobo”
La oposición demócrata en el Congreso acusó a Trump de actuar con fines electorales.
“La solicitud de reprogramación confirma una vez más que el presidente está obsesionado con cumplir una promesa de campaña a expensas de nuestra seguridad nacional”, tuiteó el presidente del Comité de las Fuerzas Armadas en la Cámara de Representantes, Adam Smith.
Trump prometió en 2016 construir un muro a lo largo de buena parte de la frontera sur del país, que tiene 3.200 km, una obra que dijo sería pagada por México. Pero no consiguió que sus vecinos financiaran la barrera, ni que el Congreso le otorgara los 25.000 millones de dólares que pedía.
La poderosa asociación de derechos civiles ACLU prometió el jueves tratar de evitar estas nuevas transferencias de dinero.
“Varios tribunales han decidido que Trump no tiene derecho a saquear fondos de defensa para su muro fronterizo xenófobo”, dijo un funcionario de la ACLU, Dror Ladin, en un comunicado. “Volveremos a los tribunales para bloquear estas transferencias adicionales que no han sido autorizadas”.
En enero, sin embargo, un tribunal de apelaciones respaldó el desvío de Trump de los fondos presupuestarios federales ya propuestos para el proyecto, eliminando una suspensión de gastos instaurada por un tribunal inferior luego de una demanda presentada por opositores.
(Por Sylvie LANTEAUME y Alina DIESTE - AFP)