Una periodista de MSNBC se volvió noticia luego de que se viera en la necesidad de llevar a sus gemelos al trabajo. Courtney Kube se encontraba en la transmisión de un noticiero, cuando uno de sus pequeños la interrumpió en vivo. Una enternecedora imagen que de inmediato se viralizó.
La reportera se encontraba informando sobre las operaciones militares de Turquía para salvaguardar territorio sirio, cuando el menor comenzó a aparecer sigilosamente a su espalda hasta acaparar por completo la atención de las cámaras que se encontraban produciendo en vivo el mensaje de su madre.
La corresponsal de NBC News de Estados Unidos se ruborizó ligeramente, cambió su semblante serio y esbozó una ligera sonrisa. No le quedó más remedio que pedir perdón a la audiencia y relajarse por unos instantes.
“Disculpen, mis hijos están aquí. ¡Así es la televisión en vivo!”, dijo Kube, quien ha recibido el apoyo de sus colegas y de la cadena, al tratarse de un momento que se salió de sus manos y reflejó el lado humano del periodista más allá de su labor.
Fueron solo unos segundos, porque desde la producción taparon la imagen con un mapa de la información que estaba ocurriendo en el otro lado del mundo.
“A veces pasan noticias inesperadas cuando estás reportando noticias de última hora”, escribió la cadena en Twitter, junto a un video del hijo de Kube interrumpiéndola en televisión en vivo y los hashtags #MamásDeMSNBC y #MamásTrabajadoras.
A su vez, su colega, la corresponsal Julia E. Ainsley también escribió en Twitter sobre Kube: “Madre de gemelos y la mejor en su trabajo. @ckubeNBC lo hace todo bien”.
“Este niño me hizo sonreír. Ella es una madre fuerte que mantiene su trabajo y cuida a sus hijos”, expresó un televidente en Twitter, sumándose a los mensajes de apoyo a la periodista.
El video de Kube recuerda a otro momento que se volvió viral en 2017, cuando los hijos de un profesor interrumpieron su enlace en vivo con la BBC News cuando era entrevistado. Los pequeños entraron a la habitación mientras él grababa un segmento comentando sobre política, imágenes que igualmente dieron la vuelta al mundo.
El profesor Robert Kelly habló con la prensa después del famoso incidente en televisión. Él asegura que pensó que había hecho el ridículo delante de todo el mundo, pero contrario a lo que pensó, al público le pareció muy divertido.
“No podía entender porqué la BBC continuaba la entrevista”, confesó Kelly a The Guardian. “Tal vez se dieron cuenta enseguida que esto era oro en comedia”.
Un caso similar ocurrió cuando el basquetbolista estelar de los Golden State Warriors de la NBA, Steph Curry, fue abruptamente interrumpido durante la conferencia de prensa posterior a un partido de las Finales de la Conferencia Oeste del 2015 por una pequeña niña de cabello rizado.
Todo comenzó tras el primer partido de la Final del Oeste ante los Houston Rockets. No era la primera vez que un jugador se hacía acompañar por su hijo en la sala de prensa, pero ninguna como Riley, con un carisma que se hizo ganar el cariño del público.
La niña, hija de Stephen y su mujer Ayesha, lució desatada ante las cámaras, llegó a pedir a su padre que guardara silencio mientras intentaba responder las preguntas. “Hablas muy alto papá, cállate”.
Riley repitió su actuación en otras conferencias posteriores a partidos, pero durante el primer duelo de las Finales de la NBA también dejó otro guiño para su colección de enternecedores momentos, al dar un tierno beso que volvió a dar suerte a Stephen Curry.
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