Italia aprobó una reforma constitucional que elimina 230 escaños del Congreso y 115 del Senado para ahorrar más de USD 500 millones

El país, que tiene el segundo parlamento más grande de Europa, reducirá en un tercio el número de legisladores

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La Cámara de Diputados, en el Palazzo Montecitorio (Wikimedia Commons)
La Cámara de Diputados, en el Palazzo Montecitorio (Wikimedia Commons)

Los diputados italianos aprobaron este martes una reforma constitucional radical que reduce en un tercio el número de parlamentarios, promesa electoral del Movimiento 5 Estrellas cuyo objetivo es ahorrar 500 millones de euros por legislatura (cerca de USD 550 millones).

El resultado fue aplastante: 553 votaron a favor, 14 en contra y dos se abstuvieron.

En virtud de esta reforma, antigua promesa del Cinco Estrellas (M5E), el número de parlamentarios en total pasa de 945 a 600. En la actualidad, Italia tiene el segundo parlamento más grande de Europa, detrás del Reino Unido (1.455 miembros) y por delante de Francia (925). El número de diputados se reducirá de 630 a 400, mientras que el de senadores disminuirá de 315 a 200.

Luigi Di Maio, dirigente del M5E, lo convirtió en una condición sine qua non para una alianza con el Partido Demócrata (PD, centro izquierda) tras la ruptura a principios de agosto de la coalición gubernamental que el M5E tenía hasta entonces con la Liga (extrema derecha) de Matteo Salvini. Según este movimiento, basado en el rechazo de la “vieja política”, la reducción del número de parlamentarios debe generar un ahorro de unos 500 millones de euros por legislatura (cinco años en Italia). Y permitir que ambas cámaras trabajen más eficientemente.

Di Maio, también jefe de la diplomacia, argumenta que estos fondos pueden ser reinvertidos en escuelas, hospitales y ayudar a personas desfavorecidas. Hasta ahora, los socialdemócratas se habían opuesto a esta reforma pero finalmente aceptaron apoyarla, estableciendo ciertas condiciones, entre ellas una revisión de la ley electoral para intentar frenar a la Liga, primer partido de Italia con un 32% de intenciones de voto.

El antídoto del PD sería inyectar una buena dosis de proporcionalidad. Con el método de votación en vigor, la Liga, el centro-derecha de Silvio Berlusconi y la derecha posfascista de Hermanos de Italia, “podrían registrar una victoria tan importante que podrían obtener más de dos tercios de los escaños en el Parlamento”, explicó a la AFP Lorenzo Codogno, ex economista jefe del Tesoro italiano y fundador del gabinete LC Macro Advisors. Por consiguiente, “podrían modificar la Constitución sin (necesidad de) un referendo”, subraya el experto.

El senado italiano (Reuters)
El senado italiano (Reuters)

La votación del martes fue la cuarta y última sobre este tema. Como se trata de una modificación de la Constitución, el Senado y la Cámara de Diputados deben votar dos veces el mismo texto para que éste pueda entrar en vigor.

La ley aprobada este martes no entra inmediatamente en vigor, sino que es preciso que durante los próximos tres meses tras su publicación en la Gaceta Oficial se convoque un “referéndum confirmativo”, una petición que deberá ser presentada por una quinta parte del Parlamento, por 500.000 electores o por cinco regiones. Este referéndum se espera para la primavera de 2020, y no habrá necesidad de fijar un porcentaje mínimo de participación para que adquiera validez.

La mayoría de los partidos han anunciado que votarán a favor de la reforma. Por lo tanto, es probable que entre en vigor con la próxima legislatura, a más tardar en 2023. “Me parece una reforma equilibrada, de muy buen perfil”, declaró Guido Neppi Modona, exjuez del tribunal constitucional italiano.

“La reducción del número de cargos electos incitará a los partidos a escoger a sus candidatos de manera especialmente selectiva, con importantes cualidades morales, de fiabilidad y de preparación política”, estima el experto, citado por el diario Il fatto Quotidiano.

Guido Neppi Modona, en cambio, descarta el argumento más frecuentemente planteado por el M5E, a saber, la reducción de los costes de la política. “Este ahorro es mínimo, una ínfima parte del presupuesto del Estado. En cambio, estoy convencido de que el aspecto verdaderamente importante es el incentivo para una selección más rigurosa de los candidatos”, añade el antiguo magistrado.

El profesor de derecho constitucional Massimo Luciani, crítico del texto, considera que falta un “análisis sobre su impacto”. “Esta reforma, nacida con una finalidad antielitista, puede terminar por reforzar una representación parlamentaria aún más elitista”, explica en las columnas del Corriere della Sera.

(Con información de EFE y AFP)

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