La vida de un joven de origen dominicano cambió un día tras la clase de Historia, cuando cansado del bullying del que era víctima, decidió lanzarse contra dos compañeros del salón de clases con un cuchillo, con el que mató a uno y dejó malherido al otro.
Abel Cedeno fue declarado culpable hace unas semanas, y esta semana, Michael A. Gross, un juez de la Corte del Bronx lo sentenció a 14 años de prisión y 5 años de libertad condicional por los cargos de homicidio y asalto en primer grado, además de posesión criminal de armas en cuarto grado.
El joven de 20 años tenía 17 cuando ocurrieron los hechos en la escuela secundaria Urban Assembly School for Wildlife Conservation. Al término de la clase de historia, a Cedeno le arrojaron un objeto pequeño; al preguntar quién había sido, Matthew McCree, de 15 años, aceptó su responsabilidad y se disculpó.
Según los testigos, entre 15 y 20 estudiantes, Abel Cedeno reaccionó violentamente y apuñaló en el corazón a McCree, quien fue defendido por Ariane LaVoy, de 16, que también recibió cinco puñaladas. Ambos fueron trasladados a un hospital, pero Matthew McCree murió.
En tanto, Cedeno entregó el cuchillo a las autoridades escolares.
Durante su enfrentamiento con las leyes estadounidenses, Cedeno y sus abogados alegaban legítima defensa, pues argumentaron que había enfrentado acoso escolar durante años por el hecho de ser homosexual. Estableció que atacó a los jóvenes por defenderse después de mucho tiempo de abuso emocional y físico.
Sin embargo, el juez rechazó el argumento de defensa propia, pues dijo que un historial de acoso no podría verse como una "licencia para un ataque de ira asesina".
La fiscal Nancy Borko aseguró que Cedeno buscó el enfrentamiento para estrenar su cuchillo, y describió su conducta como "intencional y violenta", además de destacar que no mostró gran remordimiento y trató de minimizar sus acciones. De hecho, pidió al juez una sentencia de 30 años en prisión.
El abogado Darcel D. Clark dijo que nunca se encontró evidencia de que Matthew o Ariane hubieran cometido bullying contra el acusado. "Su ataque de ira dejó muchas vidas en la ruina, incluyendo la suya", dijo en un comunicado.
En cuanto al joven fallecido, su tía Lacey Providence dijo ante la Corte que el cuerpo de Matthew tenía una herida tan grande que se podían ver sus costillas.
Sobre el otro joven, Ariane LaVoy, su madre dijo que aunque es la más afortunada de entre ella y la madre del muchacho fallecido, lamenta que este caso dañó a su familia. Dijo que su hijo ahora toma clases en casa, pues quedó tan herido de una mano que ya no puede sostener una pluma.
El caso de Cedeno provocó que algunos activistas a favor de la comunidad LGBTTTIQ apoyaran el argumento de defensa, pues era muestra de que la diversidad sexual sigue siendo violentada en ambientes escolares.
Hoy desde la corte criminal del Bronx reportando sobre la sentencia de Abel Cedeño, quien tendrá que pasar 14 años tras las rejas y 5 años de libertad condicional luego de ser encontrado culpable de asesinar a puñaladas a un compañero de clases en septiembre de 2017 pic.twitter.com/ndsXXmHiaA
— Eliecermarte (@EliecerMarte) September 10, 2019
De hecho, el hoy sentenciado joven, fue defendido por dos abogados abiertamente homosexuales, Christopher R. Lynn y Robert J. Feldman, quienes no le cobraron por sus honorarios.
Lynn dijo ante la Corte que su cliente no tenía un historial criminal previo, y que no representaba ningún peligro para nadie, ni se convertiría en alguien peligroso; presentó cartas de algunas personas que consideraban que Cedeno podría seguir una vida productiva.
Sin embargo, según el New York Times, Michael A. Gross, no creyó que el acusado hubiera sido víctima de bullying, pues recordó que Cedeno testificó que no conocía a sus víctimas y que no lo habían atormentado. Agregó que el día de los hechos, el joven hizo una "invitación llena de obscenidades" para pelear.
Tras la sentencia, surgieron nuevos datos de un informe, en el que se sugiere que la subdirectora de la escuela, Caridad Caro, sabía que Cedeno portaba un arma, pues la madre del joven le comunicó, desde un par de años antes, que su hijo llevaba cuchillos a la escuela.
Sin embargo, Caro "no comunicó la información al director ni a nadie más en la escuela y no pudo registrar el incidente en el sistema de informes en línea del Departamento de Educación", según indicó el reporte.