La probabilidad de que la tormenta tropical Dorian se convierta en huracán continúa presente y mantiene a Puerto Rico, Florida y las Antillas Menores en alerta.
En el estado del sur de Estados Unidos, la población, así como las autoridades, han tomado medidas de prevención, ya que aunque el fenómeno no golpeará de manera directa a la entidad, sí provocará intensas lluvias el fin de semana.
El Distrito de Administración del Agua del Sur el lunes 26 de agosto liberó agua de algunos de sus canales para que estos no se desbordaran en caso de que el agua pluvial que recolecte supere los límites.
Desde ese día ya se registraron fuertes precipitaciones, por lo que las autoridades decidieron poner inmediatamente protocolos para disminuir los riesgos de inundaciones que se harán más peligrosos conforme avance la semana y Dorian llegue a su punto más cercano con Florida entre el viernes, sábado y domingo.
El miércoles será cuando las autoridades continúen con el vaciado de los conductos, "para que hayamos dejado espacio en esos canales para la escorrentía de aguas pluviales que golpea el pavimento, los patios, etc.", dijo Randy Smith, portavoz de la Administración de Agua..
Mientras tanto, los ciudadanos han asistido a los supermercados para abastecerse de agua embotellada y comida enlatada que utilizarían en situaciones de emergencia si las tormentas llegaran a provocar inundaciones.
Incluso, las tiendas Lowe's Hardware y Home Depot en Palm Beach Gardens, instalaron un pasillo entero dedicado solamente a los productos que las personas deben adquirir para prepararse para las tormentas; "Vi que la tormenta iba a llegar este fin de semana y pensé que era mejor estar preparados", dijo Ashish Gupta, residente de la zona.
Puerto Rico y Antillas Menores, las que resultarían más afectadas
Las islas del Caribe también se preparan para la llegada de Dorian, que podría convertirse en huracán entre el martes y miércoles de esta semana.
Wanda Vázquez, gobernadora de Puerto Rico, ayer lunes 26 de agosto declaró estado de emergencia para la isla. "Exhortamos a la ciudadanía a que active su plan de emergencia con precaución y tranquilidad", dijo Vázquez en Twitter.
Entre las recomendaciones para mantenerse a salvo durante el huracán, se encuentra cubrir las ventanas, podar árboles grandes y despejar áreas exteriores que con las ráfagas de viento pudieran levantarse y golpear a las personas.
La funcionaria también publicó cuáles son los refugios disponibles en distintas zonas del estado, para que las personas que no cuenten con techos seguros puedan acudir y refugiarse. Cuentan con 360 plataformas con capacidad para 48.500 personas, además de 70 hospitales preparados para emergencias.
Además, la Universidad de Puerto Rico suspendió las clases para que los jóvenes y sus familias puedan prepararse ante la probable llegada del fenómeno.
Este huracán llegaría dos años años después de María, que resultó devastador. Fallecieron alrededor de 3.000 personas a causa del fenómeno meteorológico, y aún no se terminan de resarcir los daños que provocó.
En el caso de República Dominicana, otra de las islas que sería afectada por Dorian a mediados de esta semana, las autoridades han puesto en estado de alerta a las provincias San Pedro de Macorís, La Romana, Hato Mayor, La Altagracia, Samaná y el Seibo.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos con sede en Miami, solicitó a las autoridades del país caribeño mantenerse alerta desde la madrugada de hoy, por la llegada de tormentas tropicales que podrían provocar severas inundaciones y ráfagas de viento.
Hasta el lunes 26 de agosto, Dorian se encontraba a 35 kilómetros al sudeste de Barbados y las Antillas Menores, en donde se debilitó un poco. Tenía vientos máximos de 35 kilómetros por hora, y se movía al oeste a 22 kilómetros por hora. Se pronosticó que podría fortalecerse conforme se acerque más al Caribe.