Saoirse Kennedy Hill, nieta de Robert F. Kennedy y miembro de uno de los clanes políticos más importantes de Estados Unidos, falleció la semana pasada por una presunta sobredosis de drogas en la finca familiar Hyannis Port. A unos días de su muerte, sus familiares la despidieron en un emotivo cortejo fúnebre donde la recordaron como "hermosa, fuerte y sabia, pero profunda".
La familia de la "rosa irlandesa", como la conocían sus seres queridos, se reunieron en la Iglesia Nuestra Señora de la Victoria en Centerville, Massachusetts, para despedirse de la joven de 22 años que expresó su sufrió un ataque sexual y que, incluso, intentó suicidarse hace algunos años.
Sus tíos Timothy P. Shriver y Robert F. Kennedy Jr, hablaron de las cualidades de la estudiante del Boston College y sus últimas horas de vida al lado de sus familiares.
Robert F. Kennedy Jr describió a su sobrina como una mujer de "ojos brillantes" y de "gran personalidad" que durante sus últimas horas con vida tuvo "una noche perfecta".
La joven de 22 años, según su tío, estaba muy orgullosa de terminar un ensayo de 25 páginas y que presentaría ante el Boston College. Durante esa última noche, Saoirse también cenó con su abuela y vio el debate demócrata.
"Salió a las 10.30 p.m. a un karaoke y luego bailó en un bar. Llegó a casa a las 2 de la mañana y se quedó despierta para nadar al amanecer. Ella ya tenía planes para cenar esa semana…", dijo frente a las personas que se congregaron para despedir a su sobrina.
Shriver, por su parte, recordó a Saoirse como "una niña del mar, donde no hay límites" y dijo: "Les agradecemos a Paul y Courtney por compartir este regalo extraordinario con nosotros, realmente sentimos que ella era nuestra y, en muchos sentidos, lo era".
Recordó que su sobrina "quería aprender a amarse a sí misma" y que desde su muerte el ambiente en su casa se había llenado de gentileza y amor, porque el espíritu de Saoirse los acompaña.
"Ella quería sanar, así que trabajó en ello y habló sobre ello. Ella quería ir de fiesta y todos sabemos que consiguió lo que quería", mencionó.
Agregó: "Si bien no podemos saber el lugar preciso donde está el alma de Saoirse ahora, podemos prometer que miraremos, escucharemos y nos afligiremos … y aprender mucho más a amarse. Te amo, Saoirse".
Otros familiares la describieron a Saoirse como alguien que: "amaba a Irlanda y su búsqueda de la libertad y tenía una sonrisa grande y hermosa".
Saoirse Kennedy Hill, de 22 años, nieta de Bob Kennedy, fue hallada muerta el jueves 1 de agosto en la residencia familiar de Cape Cod por una presunta sobredosis.
Era hija de Courtney Kennedy Hill, hija del candidato presidencial asesinado en 1968. Courtney fue la quinta de los 11 hijos de Ethel y RFK.
"El mundo es un lugar un poco menos bello hoy", indicó en un comunicado Ethel Kennedy, de 91 años, viuda de Robert F. Kennedy, hermano del ex presidente John F. Kennedy, el día en que su nieta murió.
La joven fue declarada muerta en el Hospital Cape Cod, después de que los servicios médicos no pudieron salvarla de una presunta sobredosis de drogas.
Saoirse, en 2016, escribió una conmovedora columna en The Deerfield Scroll, el periódico estudiantil del internado de Deerfield Academy, sobre cómo luchar contra la depresión y sobrevivir a un intento de suicidio.
En la columna, la nieta de RFK también reveló haber sido agredida sexualmente por uno de sus amigos del colegio.
"Mi sensación de bienestar ya estaba comprometida, y la perdí totalmente después de que alguien que conocía y amaba rompió serios límites sexuales conmigo", escribió Saoirse.
La angustia era insoportable: "Hice lo peor que puede hacer una víctima, y fingí que no había sucedido. Todo esto se volvió demasiado e intenté quitarme la vida".
También era conocida por su activismo político, muy interesada en el movimiento #MeToo y en el control de armas. Además, era vicepresidente de los Demócratas Universitarios del Boston College.
Saoirse pasó parte de su infancia en Irlanda. Es que su padre, Paul Michael Hill, era uno de los cuatro de Guildford, quienes fueron acusados falsamente de estar involucrados en bombardeos del ejército republicano irlandés. El hombre pasó 15 años en prisión, y en 1993, cuando su condena fue anulada y recuperó la libertad, se casó con la madre de la joven. El matrimonio se separó en 2006.