El presidente estadounidense, Donald Trump, vetó tres medidas del Congreso que bloqueaban las ventas de armas a Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos, involucrados directamente en la devastadora guerra que se desata en Yemen.
Según justificó Trump en una carta al Senado, las medidas, adoptadas la semana pasada, "debilitarían la competitividad de Estados Unidos en el mundo y dañarían las importantes relaciones que tenemos con nuestros aliados y socios". Estas ventas multimillonarias de armas fueron autorizadas a fines de mayo por el gobierno de Trump, por un valor de 8.100 millones de dólares.
Es la tercera vez que el presidente ha empleado su poder de veto desde que asumió en 2017. El primero fue para mantener viva su declaración de "emergencia nacional" en la frontera sur y el segundo anuló una resolución del Congreso que trató de poner fin a la participación de EEUU en la guerra en Yemen.
El secretario de Estado, Mike Pompeo, había dicho que la administración estaba respondiendo a una emergencia causada por el archienemigo de Arabia Saudita, Irán.
Pero los congresistas, incluyendo algunos senadores republicanos, dijeron que no había razones legítimas para eludir el Congreso, que tiene el derecho de rechazar la venta de armas a los saudíes.
El mes pasado, el senador republicano Lindsey Graham, fuerte aliado de Trump, reprendió a Riad y dijo que esperaba que su voto en contra de las ventas "enviara una señal a Arabia Saudita de que si actúa de la forma en que actúa, no hay espacio para una relación estratégica".
El senador se refería al brutal asesinato el año pasado del periodista Jamal Khashoggi en una sede diplomática en Turquía a mano de agentes sauditas, un incidente que indignó a legisladores estadounidenses y afectó las relaciones de Riad con Occidente sobre todo.
Para los críticos las ventas de armas agravarían la guerra en Yemen, donde Arabia Saudita lidera una coalición respaldada por Estados Unidos en una batalla contra los rebeldes hutíes que tienen apoyo de Irán. La ONU ha señalado que el conflicto ha provocado la peor crisis humanitaria del mundo.
Pero Trump sostuvo el miércoles que prohibir la venta de armas de Estados Unidos "probablemente prolongue el conflicto en Yemen y profundice el sufrimiento que causa" en la población. Para Trump "sin municiones guiadas con precisión, es probable que más civiles, y no menos, se conviertan en víctimas".
El presidente de Estados Unidos también señaló a Irán para justificar el bloqueo de las resoluciones.
Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos son "un baluarte contra las actividades malignas de Irán y sus representantes en la región", y las licencias de venta de armas que el Congreso buscó bloquear "mejoran su capacidad de disuadir y defenderse de estas amenazas", argumentó.
Las tensiones entre Washington y Teherán se han disparado desde que Trump sacó a Estados Unidos del acuerdo de las principales potencias con Irán el año pasado que tenía como objetivo frenar su programa nuclear y le impuso a Irán severas sanciones.
(Con información de AFP)