Un hombre falleció esta semana tras infectarse con una bacteria carnívora en las playas de Florida, en Estados Unidos. Ésta es una víctima más de la fascitis necrotizante que los turistas contraen en el mar y que hemos conocido en los últimos días.
Cheryl Bennett Wiygul relató el proceso que en 48 horas le arrebató la vida a su padre, quien enfrentaba un duro tratamiento contra el cáncer que lo aquejó durante los últimos meses de su vida.
"Las bacterias comiendo carne suenan como una leyenda urbana. Deja que te aseguro que no lo es. Se llevó la vida de mi papá. Esto es tan crudo y personal para mí que no quería publicar al respecto, pero si puedo ayudar a una persona, entonces vale la pena", escribió en su cuenta de Facebook.
Cheryl explicó que su padre padeció cáncer en los últimos años de su vida y durante ese tiempo muchas veces visitó las playas, por lo que su ingreso esta vez no le pareció un riesgo a ningún integrante de su familia.
La mujer dijo que supo de otros casos de personas que se contagiaron con la bacteria carnívora tras sufrir una herida en la piel, por lo que pensó que su padre se encontraba lejos de riesgo y aún así decidió tomar otras previsiones.
"Mi papá no tenía ninguna herida abierta. Tenía un par de lugares que donde tenía curaciones, pequeños rasguños en sus brazos y piernas que me cercioré de que estuvieran super sellados", detalló.
Con todas las precauciones tomadas, la familia disfrutó de las playas y varios destinos acuáticos todo el día y el resto de la semana. "Él era feliz y hablador, parecía sentirse bien como lo hizo toda la semana", pensó Cheryl antes de conocer la pesadilla que se avecinaba.
Doce horas después de su estancia en la playa, su padre comenzó a sentirse mal. Tuvo fiebre, escalofríos, algunos calambres y comenzó a sentir dolores intensos en las piernas. Sus padres regresaron a Memphis después de visitarla en Florida.
"Llegaron al hospital en Memphis alrededor de las 8 p.m. lo llevaron de vuelta inmediatamente. Cuando lo ayudaban a ser cambiado a su vestido de hospital, los médicos vieron un lugar oscuro y terriblemente hinchado en su espalda que no estaba allí antes. Mi mamá me envió una foto y se sintió como si alguien me golpeara. Llamé y me pregunté si era en realidad negra (porque a veces el color está fuera en una foto) y ella dijo que era negra. Nunca vi un corte en la espalda y yo tampoco lo hice. Le dije que les notificara que estuvo en el agua de Florida y que podría ser fascitis necrotizante", explicó Cheryl Bennett Wiygul en su Facebook.
Los médicos no le creyeron a su madre y sólo dieron antibiótico a su padre. La mancha de la espalda rápidamente creció de tamaño y pronto se propagó hacia los brazos, además sentía un gran dolor en el cuerpo.
"Algunas de las enfermeras dijeron que nunca habían visto nada igual. A las 1 a.m. se convirtió en séptico y lo trasladaron a la UCI. Mi papá tenía un montón de problemas médicos, pero el corazón no era uno de ellos. Tuvieron que entubarlo. Dijeron que sus órganos estaban demasiado dañados y su sangre era demasiado ácida para mantener la vida. Se fue el domingo por la tarde. Menos de 48 horas después de salir del agua se siente genial, las bacterias lo habían destruido", escribió Cheryl con tristeza.
Tras el deceso de su padre, los análisis del laboratorio confirmaron su teoría: fue infectado por "vibrio vulnificus", mejor conocida como la fascitis necrotizante o bacterias carnívoras que se transmiten al comer mariscos crudos o por alguna herida abierta.
Cheryl Bennett Wiygul reprochó a las autoridades que no haya anuncios y advertencias de la contaminación en las aguas de Florida.
"Sabía que no deberías nadar con una herida abierta, pero no me di cuenta de que no debería estar en el agua con su sistema inmunológico", reiteró en su publicación en la que también pidió a la comunidad estar al pendiente de estos problemas para que no sufran lo que su padre y su familia.
La fascitis necrosante puede ser causada por diferentes tipos de bacterias, como Strep o Vibrio vulnificus del Grupo A. Las bacterias, que a menudo se encuentran en el agua, entran al cuerpo a través de una herida abierta.
El Departamento de Salud de Florida explicó que están "tomando en serio este problema" y recomendó evitar pasar tiempo en jacuzzis, piscinas o en el mar si se tiene una herida abierta.
En este lugar ya se han reportado otros casos que han tenido un desenlace fatal.