En Nuevo México, una pareja de estadounidenses llevó a nuevos límites el maltrato infantil y el concepto de familia disfuncional, luego de que se revelaron los castigos que imponían a sus 15 hijos.
Los niños de Martha Crouch y Timothy Crouch denunciaron a sus padres por los crueles abusos y maltratos a los que fueron sometidos. Los documentos presentados en la corte contienen relatos dignos de una casa de los horrores.
En los documentos judiciales está registrado el testimonio de una de las siete hijas de la pareja, quien aseguró que en un arranque de furia su madre cocinó vivas a las crías de una perra de la familia y obligó a que todos los niños la vieran. "Tomó a los cachorros y los puso en una olla gigante y los hirvió", describió la menor.
La niña de 17 años dijo que el horrible incidente ocurrió el mismo día que su madre le disparó a otro de sus perros.
Los investigadores de la oficina del alguacil del condado de San Juan escucharon las acusaciones tras el arresto de uno de los hijos adultos de Crouch, que había participado en un asalto con arma de fuego.
Desde entonces, el Departamento de Niños, Jóvenes y Familias de Nuevo México ha recibido cientos de quejas sobre Crouch y su esposo Timothy de distintas agencias de servicios sociales.
"Es una investigación en curso que nos llevará algo de tiempo", dijo el portavoz de la Oficina del Sheriff del Condado de San Juan, Jayme Harcrow, al diario Farmington Daily Times.
Los investigadores encontraron acusaciones de que algunos de los niños nunca fueron a la escuela, y que tampoco eran alimentados adecuadamente.
La hija adolescente dijo que el mes pasado su madre la golpeó con una espátula de plástico por decirle que estaba harta de que ella y sus hermanos no estuvieran recibiendo una educación y que los iban acusar con servicios sociales. La misma joven detalló que el abuso se hizo tan grave que dos de sus hermanos mayores la llevaron de Nuevo México a Arizona para mantenerla a salvo.
Otra hija, cuya edad no fue revelada, dijo que quedó embarazada a los 14 años y que su madre la golpeó hasta que tuvo un aborto involuntario.
Crouch, de 53 años, fue arrestada el lunes y acusada de maltrato infantil y extrema crueldad hacia los animales. Su esposo, Timothy Crouch, de 57 años, está acusado de obstruir una investigación por parte del Departamento de Niños, Jóvenes y Familias de Nuevo México.
Deben presentarse en la corte el miércoles y aún no han sido asignados defensores públicos.