Docenas de agentes e investigadores del Departamento de Seguridad Nacional serán desplegados en el terreno de la frontera entre Guatemala y México, según informaron fuentes militares dijeron al Washington Post.
Se trata de un nuevo intento por parte de la Administración del presidente Donald Trump por frenar la inmigración ilegal proveniente de Centroamérica.
El personal del Departamento de Seguridad Nacional trabajará asesorando a la policía nacional y a las autoridades migratorias de Guatemala, y tratarán de impedir las operaciones de contrabando de personas, dijeron los funcionarios.
Las autoridades de Estados Unidos esperan que el esfuerzo interrumpa las rutas populares hacia Estados Unidos y disuada a los migrantes de comenzar sus viajes hacia el norte a través de México.
El plan prevé la presencia de al menos varias docenas de agentes e investigadores; una fuente aseguró que podrían llegar a desplegar en total unos 80 agentes.
El secretario interino del Departamento de Seguridad Nacional, Kevin McAleenan, ha defendido la idea de tener una presencia más fuerte en Guatemala, y en ese sentido ha mantenido una serie de reuniones con el presidente Jimmy Morales y otros altos funcionarios esta semana en el país centroamericano.
"Estados Unidos y Guatemala están formalizando una serie de iniciativas para mejorar la vida y la seguridad de nuestros respectivos ciudadanos mediante la lucha contra la trata de personas y el contrabando de mercancías ilegales, ayudando a limitar los factores que fomentan la peligrosa migración irregular a Estados Unidos, perpetuando la actual crisis en la frontera", dijo McAleenan en un comunicado, tras firmar un "Memorando de Cooperación" con funcionarios guatemaltecos.
El presidente Donald Trump, quien amenazó el jueves con imponer severos aranceles a las importaciones mexicanas si su gobierno no toma medidas enérgicas contra la migración a través de su país, ha prometido cortar la ayuda a América Central en un esfuerzo por presionar a los líderes de la región.
Sin embargo, McAleenan ha instado a una mayor cooperación con América Central y, en efecto, su plan de asignar personal de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos e Investigaciones de Seguridad Nacional para trabajar junto a la policía guatemalteca equivale a un intento de poner más peso detrás de este enfoque.
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