La tormenta subtropical Andrea, formada este lunes con diez días de adelanto sobre el inicio oficial de la temporada de huracanes en el Atlántico, se desplaza hacia el norte sin representar amenaza alguna para tierra y posiblemente se disipará el miércoles, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC).
A las 5 am EST del martes Andrea estaba localizada a unas 295 millas (475 km) al sur-suroeste de la isla de Bermuda y se movía a 6 millas por hora (9 km/h) en dirección norte.
Con vientos máximos sostenidos de 40 millas por hora (65 km/h), que se sienten hasta 60 millas (95 km) de su centro, Andrea seguirá avanzando hacia el norte hasta esta tarde, cuando se espera que vire hacia el noreste y esta noche o mañana hacia el este.
A partir de esta noche se debilitará y se espera que se disipe el miércoles.
El NHC, que precisamente esta semana anunciará sus pronósticos para la temporada 2019, había informado este lunes en un comunicado a primera hora de la posibilidad de esta tormenta tropical o subtropical que tendría escasa duración.
En la temporada de 2018 se formó otra tormenta, "Alberto", unos días antes del comienzo oficial de la temporada.
Alberto, que como lo es Andrea fue una tormenta subtropical, lo que significa que es un híbrido entre las tormentas de núcleo frío (invierno) y las de núcleo caliente (verano), descargó fuertes lluvias en Cuba y Florida, antes de tocar tierra en este estado el 28 de mayo de 2018.
Según el pronóstico anual de la Universidad Estatal de Colorado (CSU), difundido el pasado 4 de abril, la temporada de huracanes 2019 en la cuenca del Atlántico tendrá una actividad "ligeramente por debajo del promedio" debido al bajo impacto del fenómeno meteorológico de El Niño en el Pacífico.
Según el informe, si esa situación persiste, como se anticipa, habrá menos posibilidades de que se formen huracanes, por el impacto de El Niño en los vientos del Caribe.
Dicho de otro modo, "habrá menos combustible para la formación de ciclones tropicales y para la intensificación de esos ciclones", debido a que la atmósfera estará más estable y más seca, precisó entonces Philip J. Klotzbach, jefe de investigaciones del Departamento de Ciencias Atmosféricas de CSU.
De esta forma se anticipan trece tormentas con nombre entre el 1 de junio y el 30 de noviembre, con cinco huracanes, dos de ellos con vientos sostenidos de unos 180 kilómetros por hora, es decir, categoría 3 en la escala de Saffir/Simpson de un máximo de cinco.
Con información de EFE