SpaceX de Elon Musk ha convertido el lanzamiento de satélites para clientes comerciales, la NASA y el Ejército de Estados Unidos en un negocio.
El miércoles, la compañía lanzará sus propios objetos orbitales en un paso clave hacia la creación de una constelación espacial que transmita banda ancha a zonas aisladas de todo el mundo. Es una apuesta que Musk hace junto con el también multimillonario Jeff Bezos para conseguir ingresos como proveedor de internet desde el espacio exterior. Musk fundó SpaceX en 2002 con el objetivo de colonizar Marte.
Los primeros 60 satélites operativos para el proyecto de SpaceX, llamado Starlink, serán lanzados a bordo de uno de los cohetes Falcon 9 de la compañía alrededor de las 10:30 pm hora local del miércoles desde la estación de Cabo Cañaveral en Florida.
Weather is 80% favorable for tomorrow’s Falcon 9 launch of Starlink. Launch window opens at 10:30 p.m. EDT → https://t.co/gtC39uBC7z pic.twitter.com/RHveMmfOi9
— SpaceX (@SpaceX) May 15, 2019
SpaceX señaló el martes en Twitter desde su sede en Hawthorne, California, que "las condiciones meteorológicas son 80% favorables" para un lanzamiento sin retrasos. Después del lanzamiento y el despliegue de carga útil, SpaceX intentará aterrizar la primera etapa del Falcon 9 en un barco drone en el Océano Atlántico.
Cerca de una hora y dos minutos después del despegue, los satélites Starlink comenzarán a desplegarse a una altitud aproximada de 440 kilómetros sobre la Tierra, detalló SpaceX, luego utilizará la propulsión a bordo para alcanzar una altitud operativa de 550km. Cada satélite está equipado con un sistema de navegación que le permite a SpaceX posicionar con precisión los satélites, rastrear basura espacial en órbita y evitar colisiones.
Después de compartir en Twitter una foto de los satélites colocados en el carenado de la carga útil del cohete, Musk advirtió que "es probable que muchas cosas salgan mal" en la primera misión, y que se necesitarán seis más lanzamientos de 60 satélites cada uno para brindar cobertura "menor" de banda ancha.
Alrededor de 4.000 millones de personas, la mayoría de las cuales se encuentran en África y el sudeste asiático, no tienen acceso a internet confiable y asequible. Incluso en EE.UU., una cuarta parte de los habitante de zonas rurales afirman que el acceso a internet de alta velocidad es un problema importante, según una encuesta del Pew Research Center realizada en 2018.
Fuente: Bloomberg