Una crítica en redes sociales sobre el consentimiento y los alcances del uso del reconocimiento facial en los aeropuertos desató una polémica sobre si es posible rechazar este tipo de identificación, cada vez más usada en los aeropuertos de los Estados Unidos.
"Acabo de abordar un vuelo internacional de JetBlue. En lugar de escanear mi pase de abordar o entregar mi pasaporte, tuve que mirar a una cámara antes de que me permitieran entrar en el puente rumbo al avión. ¿El reconocimiento facial reemplazó a los pases de abordar, sin yo saberlo? ¿En qué momento di mi consentimiento?", tuiteó la escritora norteamericana MacKenzie Fegan.
El mensaje de la escritora empezó a sumar miles de retuits y likes en apenas unas horas. Pero la aerolínea inmediatamente le respondió. "Puedes optar por salir de este procedimiento, MacKenzie. Una disculpa si esto te hizo sentir incómoda", escribieron.
Pero Fegan tenía más preguntas sobre los detalles del proceso. "Presuntamente estos escáneres de reconocimiento facial comparan mi imagen con algo en función de verificar mi identidad, ¿cómo saben ustedes si efectivamente soy yo?", cuestionó.
JetBlue confirmó entonces que la información ers proveída por el Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos. "Entonces, para ser claros, ¿el gobierno proveyó mi información biométrica a una compañía privada? ¿Consentí esto? ¿Cuánto tiempo la aerolínea tendrá esa información? Si elijo no usar el reconocimiento facial, de todos modos ustedes ya tiene mi información, ¿no es así?", señaló la neoyorkina.
Pero JetBlue clarificó el tema. "Estas fotos no son proveídas a nosotros, son transmitidas de manera segura a la base de datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés). JetBlue no tiene acceso directo ni almacena las imágenes.
"Miré a la cámara y unos segundos más tarde la puerta se abrió. ¿Mi imagen, en el espacio de unos segundos, enviada a la CBP, corroborada en la base de datos, emparejada con mi nombre y enviada de regreso a la aerolínea?", volvió a preguntar, escépticamente, Fegan.
A pesar de que la aerolínea respondió con un documento con los detalles de cómo funciona el proceso de identificación facial, Fegan regresó con más preguntas. "En el texto dice 'no se requiere ningún pre-registro', ¡si lo sabré! Este comunicado de prensa no me dice nada realmente sobre cómo funciona el tema. ¿Qué tan preocupada debería estar?", preguntó Fegan.
La aerolínea compartió un nuevo enlace, donde se explicaba con amplitud cómo se llevaba a cabo el proceso de identificación facial. "Suena como si optar por no usar este proceso no fuera una opción realmente. Quizá pueda elegir no pasar por el escáner, pero mi información ya ha sido accesada y cargada en la base de datos", finalizó la escritora.
El reconocimiento facial es una tecnología que las autoridades en Estados Unidos quieren aplicar en todos sus aeropuertos, donde se espera identificar al 97% de los pasajeros en los próximos cuatro años, para permitirles la salida del país norteamericano. Actualmente sólo lo hacen en 15 de sus bases aéreas.
La CBP explicó que el escaneo facial consiste en fotografiar a los pasajeros antes de abordar su vuelo hacia cualquier parte del mundo, con lo que se hace un análisis cruzado en una base de imágenes de rostros de solicitudes de visa y pasaporte.
Si ambas instantáneas coinciden, se comprueba la identidad del usuario y la CBP crea un archivo de salida o “salida biométrica”, con lo que podrá abandonar EEUU sin ningún problema.
Sin embargo, los críticos consideran que esta práctica es una amenaza a las libertades civiles, porque la base de datos fotográfica podría compartirse con otras agencias y ser una herramienta de búsqueda para todos los agentes de la ley.