Donald Trump tiene en sus manos el futuro de miles de trabajadores extranjeros que laboran profesionalmente en Estados Unidos. Debido a las políticas del presidente de aquel país, se han topado con pared al intentar renovar por primera vez sus visas H-1B.
Lo mismo sucede con quienes buscan por primera vez emitir ese carnet.
La política de "Estados Unidos Primero" impulsada por el mandatario ha provocado un incremento en la tasa de rechazo de nuevas solicitudes de la H-1B del 6% en 2015 al 32% tan solo en el primer trimestre de 2019, de acuerdo con un estudio de la Fundación Nacional para la Política Estadounidense (NFAP) que analiza los datos publicados por la Oficina de Ciudadanía y Servicios de Inmigración (USCIS).
El análisis retomado por la cadena Univisión hace hincapié en que entre el año fiscal 2015 y el año fiscal 2018, la tasa de rechazo de nuevas peticiones H-1B se cuadruplicó del 6% al 24%. El reporte señala que entre el año fiscal 2010 y 2015 el índice de denegación de las nuevas peticiones de visas H-1B nunca superó el 8%, mientras que en la actualidad la tasa de rechazo es tres o cuatro veces mayor.
Cabe destacar que el año fiscal estadounidense arranca el 1 de octubre y finaliza el 30 de septiembre del año siguiente. USCIS informó que tras realizar un proceso de elección al azar por computadora, ya seleccionó las 65.000 peticiones de visas H-1B para las personas que trabajarán en Estados Unidos para el año fiscal 2020.
A través de un comunicado, USCIS dijo que después de completar este proceso, determinó las peticiones de renovación de visas H-1B, conocido como exención por maestría, las cuales suman 20 mil.
"USCIS recibió 201.011 peticiones de visas H-1B durante el periodo de presentación de peticiones que comenzó el 1 de abril, incluidas las peticiones presentadas para la exención por posgrado" detalló la agencia.
Entre 2009 y 2017, Barack Obama –a pesar de haber batido récord en el número de deportados con más de 2,5 millones en sus dos gobiernos– no arremetió contra los programas de inmigración legal, como sí ocurre con la actual administración de Trump. Por el contrario, Obama permitió que los cónyuges (H-4) que tuvieran aprobado el trámite de la green card, y se encontraran a la espera de un cupo de visa disponible por parte el Departamento de Estado, pudieran tramitar una autorización de empleo (EAD).
"(El incremento en el porcentaje de rechazo) se debe a que con este gobierno hay mayor rigurosidad en el proceso y adjudicación de solicitudes", dijo a Univisión José Guerrero, un abogado de inmigración que ejerce en Miami, sur de Florida. "La USCIS es más estricta en la manera de revisar las peticiones", agregó.
Advirtió además que "los trabajadores profesionales extranjeros deberían contratar los servicios de un profesional especializado en esta área", que definió como "muy compleja y técnica".
"Por nada deben confiar en un tramitador o en un notario. El tecnicismo del proceso es tan delicado en algunos pasos, que hasta para un abogado el trámite de la visa H-1B es difícil", añadió.
Univision confirmó el incremento en la tasa de rechazos de solicitudes de visa H-1B a través de una consulta a la USCIS, que a su vez explicó que eso forma parte "de nuestros esfuerzos para cumplir con la orden ejecutiva 'Compra americano, contrata estadounidense'".