Un migrante mexicano falleció el pasado miércoles bajo custodia de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) en el Centro de Procesamiento de Servicio en Florence (SPC), en Arizona, una muerte cuya causa aún no ha sido determinada, informó hoy la propia agencia federal.
Abel Reyes Clemente, de 54 años de edad, falleció a pesar de los esfuerzos del personal médico y paramédico locales, quienes trataron de reanimarlo sin éxito, dijo ICE en un comunicado de prensa.
El pasado 1 de abril, Reyes Clemente había sido puesto en observación por personal médico de SPC después de presentar síntomas de la influenza.
El día 3 de este mes, a las 6:12 a.m., el personal del centro de detenciones se percató que el migrante no respondía y no respiraba, por lo que de inmediato proporcionaron los primeros auxilios y contactaron a paramédicos.
Estos contactaron a su vez a facultativos del Centro Médico Vista Mountain (MVCM). A las 6:33 a.m., Reyes Clemente fue declarado muerto.
El migrante mexicano fue puesto bajo custodia de ICE después de ser liberado de la cárcel del Condado Maricopa, en Arizona, el pasado 26 de febrero, donde había cumplido una sentencia por un delito menor, por manejar un vehículo bajo la influencia del alcohol.
ICE indicó que el migrante había sido repatriado en cinco ocasiones, la más reciente en el 2008.
Según las regulaciones establecidas, se practicará una autopsia del cuerpo para determinar la causa de la muerte.
SPC es un centro de detenciones de inmigración ubicado en la ciudad de Florence, al norte de Tucson, Arizona. El centro es operado por el Gobierno federal y tiene 450 camas.
Este caso no es el único de fallecimiento de un migrante bajo custodia de las autoridades durante el presente año fiscal 2019.
Un niño guatemalteco de ocho años murió en un hospital de Nuevo México (EE.UU.) la última Nochebuena, tras haber estado bajo la custodia de la policía fronteriza durante más de una semana.
Este fue el segundo niño que falleció en diciembre pasado también custodiado por autoridades de frontera. El día 8 de ese mes la guatemalteca Jakelin Caal Maquín, de 7 años, falleció en un hospital de El Paso (Texas, EE.UU.) tras haber cruzado ilegalmente la frontera desde México junto a su padre.
Con información de EFEUSA