Un policía de Nueva Jersey tuvo un conmovedor detalle con una mesera embarazada y hasta las lágrimas le sacó.
Courtney English es una joven de 23 años que vive en la ciudad de Clementon y trabaja en el restaurante Lamp Post Dinner.
El fin de semana la joven le dijo a unos clientes que iba tener que dejar su trabajo porque ya casi cumplía los ocho meses de embarazo.
Pero lo que ignoró la mesera fue que la conversación también la estaba escuchando un policía que estaba cenando un plato de ensalada y un vaso de agua.
Cuando el oficial pagó la cuenta en la caja, cuyo monto era de USD 8.75, aprovechó para escribirle un mensaje a la camerera en el ticket y dejarle una propina de USD 100.
El policía, quien aparentemente había acabado de ser padre, le escribió el siguiente mensaje: "Disfruta el primero. Nunca lo olvidarás".
La persona encargada de la caja le comunicó el mensaje a la futura madre y esta no pudo contener las lágrimas.
"Seguramente escuchó mi conversación con los otros clientes cuando les dije que era mi primer bebé y que pronto me iría del trabajo", dijo Courtney al New York Post.
"Uno de los cajeros me dijo que me había dejado USD 100 y comencé a llorar", explicó la mujer, quien lleva dos años trabajando en el restaurante.
El padre de la joven quedó muy conmovido por el gesto de generosidad que tuvo el policía con su hija y decidió publicar un post en Facebook con la foto del recibo.
"Que persona tan maravillosa. No sólo dejó una propina muy generosa, también escribió un mensaje encantador. No te conozco, señor oficial, pero hiciste llorar a mi hija y básicamente le hiciste el año", escribió Brian Cadigan.
También explicó que su hija es soltera y que "trabaja duro" para poder llegar a fin de mes, a pesar de que su ex novio, el papá de la bebé, la sigue apoyando económicamente.
Courtney English planea renunciar 6 u 8 semanas después de que nazca su hija, a la que planea llamar Kayleigh.
Sorprendido por el acto de generosidad que ocurrió en su restaurante, el dueño dijo que todavía "hay fe en la humanidad".