Nakira Griner fue detenida después de fingir el violento secuestro de su hijo, para ocultar que lo golpeó, asesinó, mutiló, quemó y escondió sus restos en bolsas de basura porque "no comía ni la escuchaba".
El pasado viernes, la mujer de 24 años reportó que alrededor de las 18:30 horas, un hombre la había golpeado para arrebatarle a Daniel Griner Jr, cuando lo paseaba en su carrito por Atlantic Street.
Nakira aseguró que el secuestrador le había dado varias patadas y cuando reaccionó ya no vio el carrito ni a su hijo.
La detective Veronica Cappoli declaró que "ella dijo que sintió que alguien la pateaba; se cayó al piso y recibió varias patadas en el lado derecho y en la cabeza. Nakira dijo que cuando buscó el cochecito con DG Jr. no estaba. Nakira no pudo proporcionar ninguna descripción del acusado o de su ruta que corrió después del ataque".
La policía comenzó con la búsqueda y a las pocas cuadras de donde se cometió el robo, hallaron el cochecito y en su interior los zapatos rojos del niño.
La policía halló inconsistencias entre las imágenes de las cámaras de videovigilancia de la zona y la declaración de la madre del menor, por lo que al volverla a interrogar cambió su versión de los hechos y después falló en la prueba del polígrafo con la Policía Estatal de New Jersey.
Así las sospechas de las autoridades se colocaron sobre Nakira y las indagaciones fueron dirigidas hacia sus acciones.
Un equipo de rescate, conformado por policías estatales y municipales, iniciaron la búsqueda en las inmediaciones de la casa de la familia Griner.
Fue durante la madrugada del sábado, a las 03:00 horas, cuando los oficiales a cargo hallaron dentro de bolsas de basura los restos desmembrados y quemados del pequeño Daniel, que fueron enterradas debajo de un cobertizo en el patio de la casa en Woodland Drive.
Al someterla a un interrogatorio ante los fiscales de Cumberland, la mujer originaria de Bridgetone declaró sus culpabilidad. Admitió que golpeó y asesinó a su hijo porque "no comía ni escuchaba".
Griner confesó que le pegó al niño hasta provocarle moretones en la cara y después le propinó otro golpe que lo hizo caer por un tramo de las escaleras de su casa; la mujer en lugar de pedir ayuda o llevar a Daniel al servicio médico, lo sentó en el carrito y lo dejó solo.
Nakira Griner fue detenida y acusada de los delitos de asesinato en primer grado; poner en peligro el bienestar de un menor de edad; la profanación de restos humanos, y la manipulación de pruebas.
La mujer comparecerá en la corte el jueves próximo para determinar su futuro.