Casi cinco millones de adolescentes consumen productos del tabaco, especialmente cigarrillos electrónicos, en Estados Unidos, una cifra en aumento y con tintes de epidemia, de acuerdo con un reporte del Centro de Control y Prevención de Enfermedades (CDC).
"El dramático aumento del uso de cigarrillos electrónicos entre la gente joven a lo largo del año pasado amenaza con acabar con el progreso logrado en la reducción del consumo de tabaco entre jóvenes", declaró Robert Redfield, director del CDC, en una conferencia de prensa.
A juicio de Redfield, "esta tendencia está poniendo a una nueva generación de personas en riesgo de adicción a la nicotina".
El informe encontró que en 2018 al menos 4,9 millones de jóvenes consumían regularmente productos del tabaco, mientras que en 2017 eran 3,6 millones.
La gran mayoría (4,04 millones) de los consumidores de 2018 estaban cursando estudios en escuelas secundaria superiores (high school) y 840.000 en la escuela secundaria media (middle school), es decir que tenían entre 11 y 13 años y entre 14 y 18 años.
El estudio determinó que más de 1 de cada 4 estudiantes de 11 a 13 años y aproximadamente 1 de cada 14 de 14 a 18 años habían consumido un producto derivado del tabaco en los últimos 30 días.
Tras analizar las últimas cifras, los investigadores encontraron que el consumo de los productos de tabaco aumentó un 38,3 % entre los estudiantes de secundaria durante el período de 2017 y 2018, aumento que contrasta con lo ocurrido en años anteriores y que aseguran fue impulsado principalmente por un mayor uso de cigarrillos electrónicos.
"A pesar de esta inquietante tendencia, ya sabemos qué funciona y tenemos el deber de seguir usando estrategias de eficacia comprobada para proteger a los jóvenes estadounidenses en riesgo por este problema de salud que podría prevenirse", afirmó Redfield.
La investigación halló que el uso de cigarrillos electrónicos pasó del 11,7 % al 20,8 % entre los estudiantes de 11 a 13 años, y de un 3,3 % a un 4,9 % entre los de 14 a 18 años de 2017 a 2018.
Los demás productos de tabaco, entre ellos los cigarrillos, no registraron un cambio significativo durante este período, de acuerdo con el reporte.
Las autoridades expresaron su preocupación por el aumento del uso de cigarrillos electrónicos, que es el producto de tabaco más consumido o usado, y el cual es más común entre los hombres, las personas blancas y los estudiantes de escuela secundaria superior, advirtieron.
"Tememos que esta tendencia continuará en el 2019 y por ello estamos obligados a tomar decisiones difíciles en cuanto a la regulación de los cigarrillos electrónicos", señaló en la conferencia de prensa Scott Gottlieb, comisionado de la Agencia Federal de Alimentos y Medicamentos (FDA).
Los cigarrillos electrónicos (20,8 %) fueron el producto de tabaco más utilizado por los estudiantes de secundaria en 2018, seguidos por los cigarrillos tradicionales (8,1 %), los puros (7,6 %), tabaco sin humo (5,9 %), narguile (4,1 %) y pipas de tabaco (1,1%).
El consumo de productos de tabaco entre estudiantes fue más alto entre los hombres que las mujeres, y cuando se analizó por grupos étnicos, los blancos constituyeron el grupo con mayor porcentaje de consumidores (32,4 %), seguido de los hispanos (21,7 %) y los afroamericanos (17,4 %).
De acuerdo con el informe, JUUL es actualmente el cigarrillo electrónico de mayor venta en Estados Unidos entre los jóvenes, en gran parte debido a que se asemeja a una memoria USB y es fácil de ocultar y usar en las escuelas.
Este dispositivo utiliza cartuchos o cargas de nicotina líquida llamadas cápsulas, que vienen en sabores atractivos para los menores y contienen tanta nicotina como un paquete de cigarrillos.
Además de JUUL, otros cigarrillos electrónicos comúnmente utilizados son los de las marcas Vuse, MarkTen XL, Blu y Logic.
La FDA calificó recientemente de "proporción epidémica" el uso de cigarrillos electrónicos entre adolescentes en Estados Unidos.
El CDC recomienda tomar medidas adicionales con el fin de limitar el consumo de nicotina entre los jóvenes y evitar que se vuelvan adictos a esta sustancia.
Para ello piden a las autoridades federales aumentar la edad mínima para la compra de productos de tabaco a 21 años y prohibir la venta de productos de tabaco con sabores atractivos para los menores.
Asimismo, las autoridades sanitarias recomiendan a las escuelas ser más estrictas al garantizar un campus libre de consumo de tabaco, que incluya a los cigarrillos electrónicos.
El consumo de tabaco es la principal causa de enfermedades y muertes que pueden prevenirse en Estados Unidos, de acuerdo con el CDC.
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