El crecimiento del empleo aumentó en Estados Unidos en enero, con la mayor cantidad de trabajadores contratados en 11 meses, lo que apunta a una fortaleza subyacente de la economía pese a un panorama más sombrío que llevó a la Reserva Federal a mostrarse más cauta sobre su ciclo de endurecimiento monetario.
"We added 304,000 jobs, which was a shocker to a lot of people. It wasn't a shocker to me." pic.twitter.com/hHzogMtXG5
— The White House (@WhiteHouse) February 1, 2019
Las nóminas no agrícolas subieron en 304.000 el mes pasado, el mayor incremento desde febrero del 2018, dijo el viernes el Departamento del Trabajo. El crecimiento fue impulsado por los sectores de la construcción, el comercio minoristas y de servicios, así como por la actividad en restaurantes y hoteles.
Los datos de noviembre y diciembre se revisaron para mostrar 70.000 empleos menos de lo reportado previamente. La economía estadounidense debe crear casi 100.000 puestos por mes para mantenerse a la par del crecimiento en la población en edad de trabajar.
Por su parte, el presidente Trump se refirió al respecto tuiteando: "¡Empleos, empleos, empleos!"
JOBS, JOBS, JOBS! https://t.co/29dViqkEV7
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) February 1, 2019
Economistas consultados en un sondeo de Reuters proyectaban que las nóminas no agrícolas aumentarían en 165.000 puestos de trabajo el mes pasado.
La tasa de desempleo subió a un 4,0 por ciento, un máximo de siete meses, impulsada por la paralización parcial del gobierno, la más larga de la que se tiene registro.
Entre los hispanos el desempleo subió al 4,9 %, cinco décimas más que el 4 ,4 % en que se había situado en diciembre.
El pago promedio por hora subió 3 centavos, o un 0,1 por ciento en enero, después del 0,4 por ciento en diciembre, lo que redujo el aumento anual de los salarios a un 3,2 por ciento desde el 3,3 por ciento.
El reporte se conoce dos días después de que la Reserva Federal señaló que su campaña de alza en las tasas de interés de tres años podría estar terminando debido al aumento de las dificultades económicas, incluida la volatilidad de los mercados financieros y un desaceleración del crecimiento mundial.
"La Reserva Federal se acobardó ante nuevas alzas de tasas este año y están leyendo mal el futuro de la economía en las hojas de té", dijo Chris Rupkey, economista jefe de MUFG en Nueva York.
"Las empresas de Estados Unidos no han cedido ni un poco en su contratación en respuesta a los riesgos que existen en la economía mundial", añadió.
Con información de Reuters y EFE
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