La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, dijo que el arresto del ex asesor de campaña de Donald Trump, Roger Stone, por la oficina del fiscal especial Robert Mueller en la mañana de este viernes no tiene nada que ver con el presidente.
Stone fue arrestado en Fort Lauderdale, Florida, tras ser acusado por un gran jurado federal el 24 de enero en Washington DC. Enfrenta acusaciones por siete cargos, incluyendo obstrucción, manipulación de testigos y declaraciones falsas. El acusado sostiene su inocencia.
La imputación de Stone es el informe más detallado hasta la fecha de cómo el equipo de campaña del presidente electo era consciente en el verano de 2016 de que correos electrónicos de la campaña de Hillary Clinton habían sido robados.
Los documentos de la corte alegan que entre julio y septiembre de ese año Stone habló con los altos funcionarios de la campaña de Trump sobre WikiLeaks "y la información que podría haber tenido podría ser perjudicial para la campaña de Clinton". En octubre de ese mismo año, el fundador del sitio que filtra información sensible, Julian Assange, convocó a una conferencia de prensa revelando secretos sobre Hillary Clinton.
“Poco después del lanzamiento, un asociado de un alto funcionario de la campaña de Trump envió un mensaje de texto a Stone agradeciéndole ‘bien hecho’. En conversaciones posteriores con altos funcionarios de la campaña de Trump, Stone reclamó el crédito por haber predicho correctamente el lanzamiento del 7 de octubre de 2016“, de acuerdo a los documentos de la fiscalía.
En vivo desde CNN, Sanders no precisó la identidad del funcionario que ordenó a Stone obtener información sobre las revelaciones de WikiLeaks.
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