Los Estados Unidos acusaron a dos hackers iraníes de extorsionar a hospitales, municipalidades y otras instituciones públicas a lo largo de 34 meses con un virus que exigía pagos por el rescate de los datos, ocasionando pérdidas estimadas en 30 millones de dólares.
El caso se conoció este miércoles en los tribunales de New Jersey, que acusaron a Faramarz Shahi Savandi, de 34 años, y a Mohammad Mehdi Shah Mansouri, de 27, ambos de nacionalidad iraní, por su participación en el esquema de hackeo y extorsión con un "sofisticado ransomware". Según los cargos presentados, Savandi y Mansouri crearon desde Irán el virus SamSam, capaz de encriptar los datos de las víctimas.
La investigación señala que a partir de diciembre del 2015, lograron aprovechar las vulnerabilidades de seguridad y entraron a los sistemas sin autorización para instalar el virus, lo que "secuestró" los datos de las víctimas, calculadas en más de 200, entre las que se encontraban las ciudades de Atlanta, Newark, el Departamento de Transporte de Colorado, la Universidad de Calgary y seis entidades sanitarias en ciudades estadounidenses.
Una vez infectados los sistemas, los acusados se contactaron con las instituciones para exigir un pago en bitcoins para liberar los datos. Según la acusación, los hackers recolectaron más de USD 6 millones y causaron pérdidas estimadas en más de USD 30 millones.
"La actividad criminal dañó agencias del Estado, ciudades, hospitales e incontables víctimas inocentes", lamentó Rod Rosenstein, fiscal general adjunto de los Estados Unidos.
MÁS SOBRE ESTE TEMA: