Bob Menéndez, el senador demócrata por Nueva Jersey derrotó al ex ejecutivo farmacéutico Bob Hugin, quien hizo una fuerte campaña con una inversión de más de USD 36 millones de su propio dinero, incluidos USD 10 millones en anuncios únicamente dedicados a campaña de ataques contra el senador, quien hace pocos años enfrentó un juicio por corrupción.
Menéndez fue exonerado, ya que el jurado no se pudo poner de acuerdo, por cargos federales de corrupción en 2015. El Comité de Ética del Senado lo "reprendió" por aceptar regalos a cambio de favores.
Esa controversia proporcionó el complemento perfecto para Hugin, quien logró minar la popularidad de Menéndez en áreas donde debía haber sido mucho más sólido.
Su historial de donaciones de USD 200.000 a la campaña de Donald Trump en 2016 y de servir como presidente de finanzas de su propia campaña en Nueva Jersey —un estado históricamente demócrata— fue difícil de borrar.
El propio Bob Hugin se sorprendió cuando el presidente tuiteó su respaldo en el Día de las Elecciones y su portavoz respondió con una simple declaración que decía: "Gracias."
Menéndez evitó ser condenado gracias a la división del jurado, pero fue reprendido oficialmente por el comité de ética del Senado, que lo obligó a pagar una parte de los regalos que recibió.
"Desde tocar puertas y hablar con los votantes hasta hacer llamadas y organizar eventos, nuestros partidarios han trabajado sin descanso", escribió en la cuenta oficial de Twitter de su campaña Menéndez, quien agregó agradeció a sus votantes con un sincero: "¡Gracias!".
Líderes del partido demócrata habían instado a sus electores a sacrificar sus principios y reelegir a Menéndez en aras de atacar al presidente Trump en unos comicios considerados como un referéndum sobre la administración del republicano.
Nacido en Nueva York, el político de 64 años fue elegido por primera vez al Congreso en el año 1992 y es senador por Nueva Jersey desde 2006.
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