Pasajeros de la aerolínea British Airways con destino a Gran Bretaña fueron sometidos a un "vuelo del infierno" luego de que su avión quedara varado en los EEUU por más de tres días.
El vuelo que tenía como ciudad de origen a Orlando, Florida, debía partir el pasado jueves pero una serie de desperfectos técnicos hizo que fuera desviado a Nueva York, donde recibió el permiso para volar y llegar a Londres ayer domingo.
Representantes de la aerolínea dijeron que la aeronave utilizada para el vuelo BA 2036 había tenido "problemas técnicos menores" que obligaron a que quedara en la pista por horas, luego de haber recibido la aprobación para despegar.
El vuelo finalmente debió ser cancelado y todos los pasajeros pernoctaron en distintos hoteles ubicados cerca del aeropuerto de Orlando forzados a esperar todo el viernes a recibir novedades sobre su reanudación.
El vuelo con destino al aeropuerto de Gatwick recién volvió a ser programado para el día sábado por la mañana, pero poco después de despegar fue desviado a Nueva York como una medida de precaución.
Una nave de refuerzo fue enviada a la ciudad de los rascacielos con la finalidad de llevar a los pasajeros a la capital británica "lo más rápido posible". Viajeros que se suponía iban a partir con destino a sus hogares el día jueves a las 7:25 p.m. no aterrizaron en Londres hasta el domingo a las 6:49 de la mañana.
La odisea de tres días sirvió para que los pasajeros desataran toda su furia a través de las distintas redes sociales. Muchos se quejaron por la falta de comunicación de quienes se suponía estaban a cargo, además de un servicio al cliente "desagradable".
Las 200 personas tuvieron la mala suerte de tener que quedar a la deriva en Nueva York, dado que su estadía obligada en la Gran Manzana se dio justo el fin de semana de la maratón que hizo que no hubiera cuartos disponibles para que estos durmieran.
"Imagina que tu pequeña hija tiene que pasar su cumpleaños en un aeropuerto, sentada en el piso sin saber cuando va a poder comer, dormir o tener un sitio seguro para hospedarse", tuiteó una de las afectadas.
"Los pasajeros fueron tratados de forma inhumana, solo queríamos algo para comer y beber, un sitio para dormir y que se nos mantenga informados. Fallaron en todo no importa lo que ellos aseguren", expresó otro de los damnificados en redes sociales.
Por su parte la aerolínea dijo entender que "se trató de una experiencia frustrante y agotadora" para sus clientes y ofreció sus disculpas a los afectados por la interminable demora.
"Los clientes fueron ubicados donde fue posible dado que había pocos cuartos de hotel disponibles, nuestro equipo asistió a los pasajeros en la sala de primera clase, donde se les ofreció donde dormir, comer y beber", aseguraron desde British Airways.