¿Héroe o cobarde? Estudiantes acusan a un profesor de dejarlos sin protección durante la masacre de Florida

Jim Gard fue celebrado en los días posteriores al tiroteo por encerrarse en su salón junto a seis alumnos, siguiendo el protocolo. Pero dos jóvenes revelaron ahora la otra parte de la historia

Guardar
El profesor de matemáticas pasó de héroe a villano en pocas semanas
El profesor de matemáticas pasó de héroe a villano en pocas semanas

Jim Gard, profesor de matemáticas en la escuela secundaria Stoneman Douglas, en Parkland, Florida, se convirtió en uno de los símbolos de heroísmo durante la masacre en la que el ex estudiante Nikolas Jacob Cruz asesinó con un fusil a 17 estudiantes e hirió a otros 14.

La figura de este maestro comenzó a cobrar notoriedad en los días posteriores al tiroteo ocurrido el 14 de febrero, cuando fue entrevistado por diferentes cadenas de televisión estadounidenses.

En estas entrevistas contó que en un principio, cuando sonó la alarma de evacuación y antes de saber qué ocurría, hizo que seis alumnos retornaran al salón, apagó las luces y cerró con llave, de acuerdo con el protocolo.

Tiempo después escucharon disparos y comprendieron gracias a sus celulares que un violento tiroteo estaba en curso. Permanecieron escondidos y en silencio dentro del salón hasta que fueron rescatados por las fuerzas de seguridad.

Jim Gard durante una de las muchas entrevistas que dio tras el tiroteo (Reuters)
Jim Gard durante una de las muchas entrevistas que dio tras el tiroteo (Reuters)

Su respuesta calma y adaptada a los protocolos fue valorada y pronto fue llamado "héroe". Gard incluso se comunicó con la cadena CBS mientras estaba encerrado con sus alumnos para informar sobre la situación.

Pero otras personas que también vivieron ese trágico día comenzaron a cuestionar esta narrativa, acusando a Gard de dejar afuera del salón, en los vulnerables pasillos, a muchos estudiantes que intentaban desesperadamente entrar.

La otra historia

Josh Gallagher, un joven de entre 16 y 17 años que formaba parte de la clase de matemáticas de Gard, relató en Twitter que cuando sonó la alarma él y otros 14 compañeros comenzaron a evacuar ordenadamente, sin saber aún si se trataba de un simulacro o de un incendio.

El salón estaba en un piso superior, y cuando los estudiantes llegaron a las escaleras escucharon los disparos del atacante. Gallagher relató que todos se echaron al suelo y permanecieron unos instantes en shock, sin saber qué hacer.

Entonces recordaron el protocolo y corrieron de vuelta al salón. Pero estaba cerrado con llave. "Eso nos dejó en el pasillo, agachados mientras escuchábamos los gritos de nuestros compañeros y los disparos", explicó.

Pasaron cuatro minutos así, en los que Gallagher solo atinó a llamar a su padre, quien es oficial de policía, para despedirse. 

Nos dejó en el pasillo mientras escuchábamos los gritos de nuestros compañeros y los disparos

Pero mientras hablaba por teléfono, otro profesor, a quien Gallagher no conocía, se percató del grupo varado en el pasillo y abrió la puerta de su salón para que el grupo pudiera entrar y ponerse a resguardo. Allí permanecieron hasta que fueron rescatados por las fuerzas de seguridad.

"Días después me enteré de que Jim Gard corrió de vuelta al salón sin mirar atrás y se encerró. Dejó al 75% de su clase en el pasillo para que fuera masacrada. ¿Cómo puede ser que un hombre así pueda ser visto como un héroe por los medios?", dijo.

"Jim Gard es un oportunista, y la gente no debería valorarlo como un héroe", concluyó.

Connor Dietrich, otro de los estudiantes que quedó afuera del salón junto con Gallagher, se sumó a las denuncias en la red social.

Dejó al 75% de su clase en el pasillo para que fuera masacrada

"Como uno de los chicos que quedó en el pasillo, quisiera que la gente entienda cuán aterrado y desamparado me sentí personalmente. La persona en la que confiábamos nos abandonó y eso no está bien", dijo.

Poco después Gard se defendió de las acusaciones alegando que estaba siguiendo el protocolo de mantener las puertas cerradas, según dijo al South Florida Sentinel. "Miré hacia atrás y no quedaba nadie, nadie. Tienes que cerrar la puerta, es el protocolo, no teníamos opción", explicó.

17 estudiantes fueron asesinados y 14 resultaron heridos en el tiroteo (AFP)
17 estudiantes fueron asesinados y 14 resultaron heridos en el tiroteo (AFP)

Pero también relató algo que se le había escapado en sus reconstrucciones anteriores. Mientras él y seis estudiantes permanecían encerrados escucharon golpes en la puerta y Gard se acercó a ver qué pasaba, a pesar de que tenía prohibido abrir.

Cuando quiso observar, ya no había nadie. "Si hubiera habido 15 chicos desesperados, los hubiera escuchado", se defendió.

Miré hacia atrás y no quedaba nadie, nadie. Tienes que cerrar la puerta, es el protocolo, no teníamos opción

Pero recordó también a los jóvenes escondidos que no podían "dejar entrar a nadie", según dijo a la cadena Fox. "En ese momento no teníamos idea de si era un simulacro o no", agregó.

Una semana después del tiroteo, Gallagher y su padre increparon a Gard en un evento en memoria de los muertos, una situación que generó aún más tensiones en la localidad de Parkland. "De repente este chico llega y empieza a gritarme. Luego su padre comienza a gritarme. Fue una locura", contó el profesor de matemáticas.

MÁS SOBRE ESTE TEMA:

Guardar