Una adolescente estadounidense que apuñaló nueve veces a su bebé recién nacido y lo abandonó en la vía pública podría ser condenada a muerte, pese a ser menor de edad, según los cargos presentados por las autoridades de Texas.
Erica Gomez, residente de El Paso, decidió ocultar a su familia "por temor" que estaba embarazada. La joven logró pasar toda la gestación sin que sus parientes se enteren.
Cuando llegó el momento del parto, el 9 de febrero, Gomez, decidida a ocultar el hecho, apuñaló al recién nacido en el cuello y la espalda. Lo envolvió en unas mantas y lo dejó en la calle.
Posteriormente, fue a su casa descansar, pero cuando dormía, su madre notó que estaba sangrando y la llevó a un hospital, donde le confirmaron que había dado a luz.
Algunas horas después, un adolescente que caminaba por la zona descubrió el pequeño cuerpo de la víctima y lo reportó a las autoridades. La forense Janice Diaz determinó que la causa de la muerte era un homicidio.
Con las evidencias en frente, Gomez admitió haber dejado el cadáver cerca a la casa de un vecino. Fue arrestada la semana pasada y permanece bajo custodia, con una fianza fijada en 800.000 dólares y con cargos de homicidio punible con pena capital.
Desde que se reinstauró la pena de muerte en 1976, 22 personas han sido ejecutadas por crímenes cometidos siendo menores de edad, aunque Gomez sería la primera mujer en integrar la lista de ejecutados.
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