El pasado 29 de noviembre Kate Anderson cuidaba como todos los días al pequeño hijo de la familia Smith, en una casa de Everett, en el estado de Washington. Cerca del mediodía, la mujer demostró su valentía al impedir un robo en la casa.
Pasadas las 10 de la mañana había llegado un paquete de Amazon, de una compra que habían realizado sus empleadores. Pero Kate no había tenido tiempo de retirarlo.
Minutos después, un auto se detuvo frente a la casa, una mujer se bajó y corrió hacia el porche de la residencia para llevarse el encargo.
A la niñera le pareció sospechoso que un vehículo estacionara a metros de la puerta de la casa, motivo por el cual se quedó mirando la escena desde la ventana.
Cuando se dio cuenta de las intenciones de la mujer, no dudó un segundo. Decidió salir y buscarla.
"Oye, ¿qué mierda estás haciendo? Oye, ¿qué tratas de robar?", le gritó Kate al salir de la casa. Segundos después, la alcanzó y la tiró al suelo.
La ladrona intentó subirse al auto pero volvió a caer y quedó en manos de la "niñera Rambo", como la bautizó la dueña de la casa.
En medio de los forcejeos, Kate pidió a los vecinos que llamaran a la Policía, que vino minutos después. La ladrona, que luego fue identificada como Rhieanna Schindler, fue detenida.
La Oficina del Sheriff del condado de Snohomish reveló que tenía órdenes de arresto por posesión y robo de drogas. Además, Schindler había sido arrestada más de 20 veces desde 2010.
Tanya Smith, dueña de la casa y amiga de Kate, dijo que está orgullosa de lo que hizo: "Es bastante sorprendente lo que hizo, estoy muy orgulloso de ella, y no estoy sorprendida".
Las imágenes del dramático momento quedaron captadas por las cámaras de seguridad de la casa.
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