Nueva York fue escenario de la marcha del Orgullo Gay más multitudinaria que se recuerde, desde que comenzó a realizarse en la ciudad estadounidense en 1970.
Al mismo tiempo, en San Juan, Puerto Rico, las calles se vieron plagadas de miembros de la comunidad LGTB (Lesbianas, Gays,3 Bisexuales y personas Transgénero).
A pesar de que estas marchas suelen caracterizarse por sus colores alegres y vivaces, este año ambas cedieron un tiempo a recordar a las 49 víctimas que perdieron su vida el 12 de junio en una discoteca en Orlando, en manos de un terrorista, vinculado con el estado islámico.
La mayoría de las personas que perdieron la vida era de origen latino, ya que la disco Pulse se encontraba celebrando la "Fiesta latina".
"Esto no es sólo una celebración de amor, sino un rechazo al odio", afirmó el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, en unas declaraciones a los periodistas antes de que comenzara el desfile, que se prolongó por varias horas y recorrió unos 4 kilómetros.
Otro de los que habló ante la prensa fue el sirio Subhi Nahas, fundador del movimiento LGBT en su país: "En otros lugares se persigue y se asesina a los homosexuales por lo que son, por lo que era esencial que llegara aquí".
Del desfile en Puerto Rico participó Serbella Tejeda, portavoz de la funeraria Borinquen Memorial, la cual ofreció sus servicios gratuitos a los familiares de los 23 boricuas fallecidos: "Yo perdí a dos amigos, a dos hermanos, Martín (Benítez Torres, de 33 años) y Jimmy de Jesús (Velázquez, de 50)", señaló en dialogo con la agencia de noticias EFE.
Además, el activista por los derechos de la comunidad LGTB Pedro Julio Serrano, fue parte de la marcha realizada en la ciudad de San Juan y al sostener el micrófono recordó el caso del padre que se negó a reclamar el cuerpo de su hijo por haber sido homosexual: "Que no puedas reclamar a tu propio hijo porque tus propios prejuicios te lo impiden es algo que destroza el alma a cualquiera".
LEA MÁS:
Quiénes son las víctimas de la masacre de Orlando
El 12 de junio de este año, Omar Saddiqui Mateen ingresó armado con un rifle Ar-15 a la discoteca gay Pulse y asesinó a 49 personas, y luego falleció en un tiroteo con la policía. El Estado Islámico se adjudicó el atentado, catalogado como la masacre más grande en la historia de Estados Unidos.