Irán y Portugal se medirán en lo que será el último partido del B y ambos necesitan hacer un buen papel para pasar a la siguiente ronda. Los fanáticos iraníes saben que su equipo no la tendrá fácil contra los lusos y decidieron montar una fiesta en la puerta del hotel donde se concentró el plantel europeo.
Música a todo volumen, tambores y muchos gritos, todo a altas horas de la noche, provocó algo inesperado. Los aficionados de Irán vieron como por una de las ventanas del establecimiento aparecía la sombra de Cristiano Ronaldo, quien les pidió "cordialmente" que dejen de hacer ruido ya que estaba durmiendo.
Este lunes, en el Mordovia Arena, europeos y asiáticos se medirán con el objetivo de clasificar a la siguiente ronda. Mientras que los dirigidos por Fernando Costa Santos empataron con España y vencieron a Marruecos, los iraníes sólo acumulan tres puntos de su victoria ante los africanos por 1-0.
Parados en frente del hotel Mercure, los fanáticos intentaron hacer que los jugadores lusos pasen una mala noche. En principio lo lograron por un momento, ya que la estrella del equipo rival, Cristiano Ronaldo, se acercó a la ventana y, con gestos evidentes, les pidió que bajaran el volumen, que estaba durmiendo. Lejos de detenerse, la gente comenzó a gritar más fuerte.
En simultáneo al partido entre Portugal e Irán, se jugará España contra Marruecos, allí, los españoles también están obligados a vencer si no quieren correr ningún riesgo de cara a la clasificación a octavos de final.
La selección que salga primera del Grupo B se medirá ante el segundo del Grupo A, el cual saldrá entre Rusia o Uruguay.
MÁS SOBRE ESTE TEMA: