Argentina deja de funcionar un mes cada cuatro años. Cuarenta y tres millones de argentinos mirarán hacia Rusia invocando a Leo Messi. La sufrió desde el banco en 2006 en Alemania, lloró por ella abrazado a Diego Armando Maradona en Sudáfrica y la rozó en Maracaná con una rosca caprichosa que sonrió a Neuer. Pero la Copa del Mundo le ha brindado otra oportunidad.
La primera prueba en el camino de la albiceleste será Islanda, un país con poco más de un centenar de futbolistas profesionales. La Ciudad Autónoma de Buenos Aires multiplica por nueve la población entera de la nación nórdica. Los 23 hombres de Heimir Hallgrímsson, que quedaron por encima de Croacia en la ronda clasificatoria, representarán a su país por primera vez en esta competición. En la otra cara de la moneda, Argentina encadena una docena de participaciones, y solo se perdió cuatro en toda su historia.
Sin embargo, catorce jugadores del plantel escogido por Jorge Sampaoli jamás han participado en un mundial. Pese a ser un conjunto que colecciona cuarenta títulos continentales a nivel de clubes, menos de una decena defendieron los colores de Argentina en Brasil, Sudáfrica o Alemania. Este dato, contrastado con la cantidad de jugadores que sí tienen esas experiencias con sus respectivas selecciones nacionales, sitúa a los de Sampaoli como el quinto equipo de Latinoamérica en veteranía mundialista.
Javier Mascherano y Leo Messi son los dos jugadores en activo con más participaciones en partidos de la Copa del Mundo, ya sea desde el once inicial o partiendo desde la recámara. Los dos tienen la opción de desbancar a ilustres como Oscar Ruggeri, Mario Kempes o el líder, Diego Armando Maradona.
El plantel que está en Rusia jugará en territorio conocido. Europa es el coto de caza de la columna vertebral del equipo. Con la convocatoria a última hora de Enzo Pérez habrá cuatro representantes de la liga argentina: Franco Armani, Maxi Meza, Cristian Pavón y el propio Enzo. El resto de futbolistas están repartidos así por el mundo:
Argentina, tierra de artilleros
Históricamente, los mejores goleadores a nivel mundial han nacido en Sudamérica. Argentina aterrizó en Rusia con un póker de ases: Leo Messi, Gonzalo Higuaín, Paulo Dybala y Sergio Agüero. Los cuatro son las estrellas en sus respectivos equipos en España, Italia e Inglaterra. El Pipa y Leo están empatados en la quinta posición de artilleros argentinos en mundiales. Y no, el que encabeza la lista no es Maradona.
El debe de Argentina en el siglo XXI
A pesar de haber llegado a la final del Mundial de Brasil, la selección no gana en los 90 minutos reglamentarios a ninguna de las selecciones que están en el top 10 histórico de los mundiales desde el 24 de junio de 1990. Aquel día Caniggia eliminó a Brasil con un gol en el minuto 80 que le dio el pase a su equipo a los cuartos de final. Desde entonces, Argentina ha necesitado prórroga o penaltis para vencer a las mejores selecciones de la historia de los mundiales. En este siglo, solo han conseguido marcar dos goles en 720 minutos de juego contra Inglaterra (sexta clasificada histórica), Suecia (décima), Holanda (octava) y Alemania (segunda).
Pese a la mala racha en las últimas décadas, Argentina ha ganado más de la mitad de partidos que ha jugado. Apenas ha perdido el 27% de sus encuentros. Por eso es el cuarto equipo con el puntaje más alto en el ranking mundialista.
Desde que a la Copa del Mundo se le conoce como tal (hasta 1970 se le llamaba Copa Jules Rimet), Argentina solo se perdió una edición; y pese a que estuvo 24 años sin tocar las semifinales, ha finalizado cuatro mundiales asentada entre los dos mejores.
El sábado vuelve Argentina a la palestra en el Otkrytie Arena, a media hora en auto de Luzhniki, el estadio donde quiere estar el 15 de julio.
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