Las sillas de los cafés volaron por las calles de Sevilla y las sombrillas fueron utilizadas como escudos después de que estallara la pelea entre los fanáticos del Eintracht Frankfurt y el Rangers en la previa de la final de la Europa League. Las imágenes de las redes sociales mostraron a los aficionados en medio del caos, mientras los seguidores del cuadro escocés comenzaron a arrojar cualquier elemento que tenían a mano al tiempo que los ultras alemanes rodeaban un restaurante respondiendo a las agresiones recibidas.
Algunos de los participantes de la gresca, en apariencia seguidores del equipo que milita en la Bundesliga, usaban pasamontañas mientras esquivaban los muebles y se los devolvían a los simpatizantes del Rangers. Varios de los protagonistas presentes trataron de usar las sombrillas que los comerciantes locales usaban para dar sombra como protección mientras aguantaban el ataque de sus rivales de esta tarde en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán.
Fuentes policiales identificaron el lugar donde ocurrió el hecho como el Puente de los Bomberos, en el barrio de San Bernardo, construido en la década de 1920 sobre las vías del tren que existían en ese momento. La ubicación está cerca de una calle del centro de la ciudad llamada Calle Puerta de la Carne, donde continuó la violencia.
No quedó claro de inmediato por qué comenzó el problema, si se realizaron arrestos o si hubo heridos graves, aparte de un fanático de los Rangers que fue cayó al suelo después sufrir una lesión en la cabeza. Los lugareños indignados se encargaron de filmar el conflicto para subirlo a las redes sociales con el objetivo que los vea el alcalde local, Antonio Muñoz, y las autoridades del Ayuntamiento de Sevilla.
Otras de las imágenes expusieron a varios ultras del Eintracht arrojando bengalas a los seguidores de los Rangers en la ciudad anfitriona después de que un grupo de 200 alemanes atacara a los fanáticos de Glasgow antes de la final de la Europa League. La policía española reveló que arrestó a cinco alemanes en la noche del martes después de que comenzaran un altercado violento con un gran grupo de escoceses que disfrutaban de algunas bebidas en las calles de Sevilla.
Las fuerzas de seguridad antidisturbios persiguieron a los ultras de Eintracht Frankfurt que momentos antes habían estado arrojando vasos y otros proyectiles a la gente del Rangers antes de la final en la ciudad del Sur de España. Un hombre resultó herido mientras estaba sentado en una de las mesas y no había sido parte de las provocaciones que desembocaron en la violencia que motivó la movilización de la policía y que terminó con la detención de cinco alemanes por delitos contra el orden público.
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