La sanción que le impuso el gobierno británico al oligarca ruso Roman Abramovich impactó de lleno en el club que es de su propiedad: el Chelsea. El club de fútbol de la Premier League está revisando los alcances del castigo sobre su dueño y horas antes de una presentación por el torneo local sufrió otro duro revés: su principal patrocinador decidió suspender el contrato.
“A la luz de las sanciones recientemente anunciadas por el gobierno hemos pedido al Chelsea Football Club que suspenda nuestra asociación. Principalmente la supresión de nuestra marca de las camisetas y las cercanías del estadio hasta nueva orden”, anunció la empresa Three UK en un comunicado que difundió la agencia AFP.
A horas de salir a la cancha del Norwich, en un adelanto de lo que será la Fecha 30 en la Premier League, distintos periodistas británicos informaron que un utilero del Chelsea tuvo que salir a comprar camisetas sin el principal sponsor en el pecho por la cancelación del acuerdo entre el club y la empresa que invertía. La empresa de telecomunicaciones Three UK suspendió provisionalmente su contrato con los Blues, luego de que el gobierno británico cancelara su venta impulsada por Roman Abramovich.
Los ejecutivos de la compañía de Reading invitaron a las autoridades del Chelsea a tapar los logos de su marca tanto en la indumentaria deportiva como también en los alrededores del estadio Stamforde Bridge. El vínculo firmado por Three y la institución londinense fue rubricado en 2020, con una extensión de tres años, a cambio de una cifra cercana a los 52 millones de dólares, según mencionó el medio The Athletic.
Además del bloqueo de activos, Abramovich no podrá ingresar en territorio británico y tendrá prohibido hacer cualquier tipo de negocio en suelo inglés por su “estrecha relación” con el régimen de Vladimir Putin. De esta forma, sus intenciones de desprenderse de los Blues se han visto abruptamente paralizadas y el futuro del club es una incógnita.
El club con sede en Londres tendrá prohibida la venta de entradas para los partidos y sólo los abonados podrán asistir a Stamford Bridge para ver los partidos del equipo. En los partidos que sean fuera de casa, los hinchas del Chelsea tampoco podrán acceder a los estadios porque no podrán comprar boletos. Los nuevos contratos de los Blues quedarán anulados, la venta de indumentaria deportiva en las tiendas oficiales del club quedará bloqueada y también quedarán suspendidos los traspasos de futbolistas.
Al mismo tiempo que el cuadro azul agota sus últimas fichas para pelearle el título de Premier League al Manchester City, se prepara para liquidar la serie de octavos de final de la Champions League ante Lille en Francia (el miércoles 16 de marzo tras el 2-0 a favor obtenido en la ida) y aguarda por la disputa de los cuartos de la FA Cup (chocará con Middlesbrough el sábado 19 de marzo) tras la caída en la final de la Copa de la Liga inglesa ante Liverpool, los directivos tratan de afrontar las cuestiones burocráticas que surgieron desde que las tropas rusas pisaron suelo ucraniano y Abramovich quedó apuntado por el gobierno británico.
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