La vida del futbolista suele ser dinámica, vertiginosa y corta, comparada con otros trabajos que nada tienen que ver con el deporte. El jugador alcanza su mejor momento después de los 20 años y le pone punto final a su carrera cerca de los 40, una edad temprana y en la que todavía tiene muchas energías para continuar desarrollándose laboralmente.
Algunos deciden seguir ligados al mundo del fútbol, ocupando un cargo directivo en el club que más los representó o sentándose en el banco de suplentes para enseñar lo que él mismo aprendió como jugador.
Sin embargo, otros eligen desprenderse totalmente de su pasado deportivo como lo hizo el ex campeón con el Real Madrid Fábio Coentrão. El portugués, que militaba en el Rio Ave de su país, se quedó sin equipo a principios de julio y recientemente reapareció en una faceta casi desconocida para los fanáticos.
El ex lateral portugués cambió el balón por el mar y así lo reconoció durante una entrevista con el canal de televisión digital Empower Brand Channel. El ex defensor de 33 años, que cuenta con dos Champions League entre sus palmarés, se mostró muy feliz por haber vuelto al mundo marítimo, el cual conoció de pequeño gracias a su padre.
“Vengo aquí desde que nací. Mi padre tenía un barco, estaba en el sector de la pesca y solía ir mucho con él, me encantaba. Cuando tenía tiempo o estaba de vacaciones venía por aquí siempre que podía”, explicó el también ex futbolista de la selección lusa.
“Mi vida era el mar: el mar y pescar. Por supuesto, sabía que el fútbol un día acabaría y que debería tomar una nueva dirección en mi vida. Y mi felicidad es esta embarcación y esta es la vida que quiero llevar”, relató.
Coentrão, que nació en Vila do Conde, una localidad plenamente pesquera situada a menos de 30 kilómetros de la capital portuguesa, compró su primer barco mientras militaba en el Real Madrid. Hoy cuenta con tres flotas y 45 personas trabajando para él.
“La gente que ama el mar y que quiere vivir la experiencia del mar necesita seguir su voluntad, su sueño. Es un trabajo también para las nuevas generaciones”, consideró el también ex futbolista del Mónaco, que cuenta con muchos jóvenes entre sus empleados, con el objetivo de seguir fomentando el interés por éste oficio.
“La vida en el mar no es una vergüenza, como mucha gente piensa. Es un trabajo como otro cualquiera. No solo eso. El mar es precioso y lo necesitamos, debe haber gente trabajando aquí. Esta gente debe ser respetada como en cualquier otra profesión”, afirmó el portugués.
Como jugador, el punto de inflexión en su carrera fue cuando fichó por el Real Madrid en 2011 después de que la directiva merengue pagara 30 millones de euros por él al Benfica. El ex lateral firmó por seis temporadas pero pasó por distintas cesiones de préstamos en el medio.
Además de las dos Champions League del 2013-14 y 2016-17, el luso cuenta con dos ligas de España, una Copa del Rey, una Supercopa de España, tres Mundiales de Clubes, dos Supercopas de Europa, tres Copas de Portugal y una Primeira liga.
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