Poco a poco y gracias a su poderío económico desde la llegada de los qataríes a Paris, el PSG se fue haciendo cada vez más fuerte en lo que a nombres dentro del plantel se refiere. Por la institución pasaron nombres como Zlatan Ibrahimovic, Edinson Cavani, Thiago Silva, hasta el día de hoy, en el que logró conformar la delantera más temible de Europa.
Con la llegada de Neymar en 2017 y posteriormente la de Kylian Mbappé comenzaba a gestarse lo que finalmente se terminó concretando éste 2021 con el arribo de Lionel Messi. El trío de estrellas despertó la atención de todo el mundo y más de uno se ilusiona con la posibilidad de jugar a su lado.
Es el caso del mediocampista croata Ivan Rakitic, que después de haber rechazado en un par de oportunidades las ofertas del club francés, reveló que ahora le encantaría formar parte del equipo dirigido por Mauricio Pochettino.
“Me encantaría. Si les falta un centrocampista puede llamarme Nasser o Leonardo mañana”, aseguró entre risas el actual futbolista del Sevilla en diálogo con Bein Sports tras ser consultado por el frustrado intento del club parisino de hacerse con sus servicios en el pasado.
Ya con un tono más serio, el jugador de 33 años explicó que, “el fichaje no se dio en su momento por diferentes circunstancias. A mi me hubiera encantado poder jugar en el PSG, pero al final me quedé más tiempo en Barcelona”.
“Lo que ha hecho los últimos años el PSG merece mi mayor respeto. Me saco el sombrero con el presidente, con Leonardo (director deportivo) y ahora su entrenador (Pochettino). Es un club que ha crecido muchísimo. Ahora tienen una gran presión y no tienen que dejarse llevar”, consideró el croata.
Rakitic, que llegó al Barcelona en 2014 logró afianzarse como uno de los indispensables en la mitad de cancha con rendimientos preponderantes durante las seis temporadas que permaneció en Cataluña. Sin embargo, durante su último año transitó momentos difíciles en los que había perdido su titularidad y veía muchos partidos desde el banco de suplentes.
Finalmente, y con el objetivo de reducir la masa salarial que tantos problemas ocasionó en la economía del FC Barcelona, la dirigencia liderada por Josep María Bartomeu, se deshizo del jugador al transferirlo al Sevilla por tan solo 1,5 millones de euros más otros nueve millones en concepto de variables.
Por último, al igual que Xavi Hernández, el mediocampista consideró que Ousmane Dembelé es uno de los mejores jugadores del mundo: “Tiene cualidades que muy pocos jugadores tienen. Claramente puede marcar la diferencia para el Barcelona. Le ruego a Dios que no se lesione más y que encuentre el ritmo. Lo vimos la temporada pasada cuando estaba en lo más alto, el Barsa se hizo muy fuerte. Es del calibre de un Neymar o jugadores de ese estilo, le encanta el uno contra uno, es muy decisivo”.
En ese contexto, el nuevo entrenador de FC Barcelona fue consultado en su primera rueda de prensa por la renovación del atacante galo y fue contundente: “Tengo muy claro que Dembélé debe seguir en el Barcelona. En su posición de extremo puede ser el mejor jugador del mundo y tenemos que ayudarle a conseguirlo. Es un futbolista que puede marcar las diferencias en el Barcelona. Su renovación es prioritaria”.
SEGUIR LEYENDO