La justicia británica rechazó este miércoles la solicitud de libertad bajo fianza del futbolista internacional francés del Manchester City Benjamin Mendy, de 27 años, acusado de cuatro violaciones y una agresión sexual. Mendy está recluido en la prisión HMP Altcourse de Liverpool y no asistió a la vista, que se celebró a puerta cerrada en un tribunal de Chester, en el noroeste de Inglaterra. Había sido detenido y puesto en prisión preventiva el viernes.
Medios británicos aseguraron que sufrió un colapso cuando vio la celda de la cárcel de categoría B y la gente con la que iba a mezclarse, ya que creyó que estaría alojado en un ala VIP para famosos y estrellas del deporte.
Una fuente de The Sun detalló: “Cuando llegó Mendy, el personal explicó que lo mantendrían en el ala de VP (allí ingresan los presos más vulnerables y presuntos delincuentes sexuales) por su propia seguridad. Pero tal vez porque es francés y su inglés no es muy bueno, entendió mal lo que habían dicho y pensó que lo estaban llevando a un ala VIP para celebridades. Tuvo un colapso cuando vio la celda y se dio cuenta de con quién se iba a mezclar. No estaba contento, fue una experiencia muy aleccionadora para él”.
El City pagó 52 millones de libras (71 millones de dólares, 60 millones de euros) por Mendy, que despuntó en el Marsella y pasó una temporada por el Mónaco, lo que convirtió al joven lateral izquierdo francés en el defensa más caro de la historia. Pero su carrera se ha visto salpicada desde entonces por las lesiones, como su rotura del ligamento cruzado en 2017, que le obligó a pasar más tiempo cuidando sus rodillas y problemas musculares que pateando un balón.
El internacional francés también saltó a la prensa sensacionalista en otoño de 2020, cuando le incautaron su Lamborghini, valorado en más de 500.000 euros, que conducía sin carné ni seguro. En esa ocasión se declaró culpable y fue multado con algo más de 1.000 dólares.
Su club, donde juega desde 2017, lo había suspendido la víspera, minutos antes de que la policía anunciara el caso. Está acusado de tres violaciones en octubre de 2020 y una violación en agosto de 2021 en su casa de Prestbury, Cheshire. También se le acusa de agredir sexualmente a una mujer, siempre en su casa, a principios de enero de este año. Las presuntas agresiones conciernen a tres mujeres, una de ellas menor de edad.
Así es que la justicia británica rechazó su solicitud de liberación bajo supervisión judicial y la próxima audiencia prevista es para el próximo viernes 10 de septiembre.
SEGUIR LEYENDO: