Inglaterra y Alemania protagonizaron uno de los mejores encuentros en lo que va de la Eurocopa. Fue vibrante de principio a fin y, aunque no tuvo la lluvia de goles de los que se llevaron a cabo en la jornada de ayer (España derrotó 5-3 a Croacia y Francia empató 3-3 con Suiza antes de la tanda de penales en la que vencieron los helvéticos), sí hubo gritos sobre el final. Fueron dos: ambos para el dueño de casa. Aunque el segundo bien pudo haber sido a favor de los germanos, que tuvieron el empate a falta de muy poco para el final en los pies de Thomas Müller.
Quedaban exactamente 10 minutos para el último silbatazo y los fanáticos británicos desataban una fiesta en Londres cuando de repente se quedaron boquiabiertos: Toni Kroos recuperó el balón y Kai Havertz dejó mano a mano al histórico Müller, quien aceleró con balón dominado y quedó cara a cara con el arquero Jordan Pickford, una de las grandes figuras de la tarde. El campeón mundial en Brasil 2014 definió cruzado con su derecha y falló. El balón a centímetros del poste y la desazón se apoderó de todo su ser.
El emblemático futbolista del Bayern Múnich quedó de rodillas, incrédulo por su definición. Sabía que sería difícil disponer de otra chance similar. De hecho no solamente los alemanes carecieron de frescura para generar otra situación que los llevara a empardar el tanteador sino que los ingleses aumentaron la diferencia gracias al oportunismo de Harry Kane, que decretó cifras finales al pleito (el primero había sido obra de Raheem Sterlinga tras una gran jugada colectiva ofensiva). En tiempo de descuento, fue reemplazado por el joven Jamal Musiala.
Esta pudo haber sido la última Eurocopa para Müller, que cumplirá 32 años en septiembre y mantiene esta competición como una cuenta pendiente, ya que había disputado las de Polonia-Ucrania 2012 y Francia 2016, ediciones en las que su seleccionado nacional cayó en las semifinales.
Para Alemania ya empezó un cambio generacional que se inició desde el banco de suplentes: Joachim Löw dejó de ser el estratega del conjunto teutón para darle paso a Hansi Flick. El primer objetivo de aquí en más será la clasificación a la Copa del Mundo de Qatar 2022. En septiembre buscarán levantar cabeza en el Grupo J de la Eliminatoria europea que lo tiene en el tercer lugar de la tabla disputadas tres jornadas (el primero saca boleto directo para el Mundial y el segundo juega el repechaje). La Maquinaria se medirá ante Liechtenstein, Armenia e Islandia a principios del noveno mes del año.
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