Miralem Pjanic llegó al FC Barcelona como uno de los primeros refuerzos de peso en medio del arribo del coronavirus al planeta. Su incorporación dio mucho de qué hablar ya que se esperaba que se convirtiera en una pieza clave dentro de un mediocampo que se vio afectado por las salidas de Arturo Vidal e Ivan Rakitic.
Sin embargo, el bosnio no supo acoplarse al estilo de juego ni a la idea de Ronald Koeman y se vio superado por jóvenes talentos como Pedri González, que se afianzó como titular con 17 años e Ilaix Moriba, quien se convirtió en la primera opción de cambio a la hora de mirar al banco de suplentes.
Es por eso que la dirigencia culé le colgó el cartel de disponible y es su principal caballito de batalla a la hora de salir al mercado. Desde España, aseguraron que se manejan dos negociaciones de intercambio por él.
Uno de los nombres que se baraja desde la cúpula dirigencial azulgrana, según el medio catalán Sport, es el del ítalo-brasileño Jorginho, que tras la llegada de Thomas Tuchel al Chelsea comenzó a ganar más minutos convirtiéndose en uno de los ejes del mediocampo.
Su estilo de juego gusta en Barcelona ya que puede asemejarse al de Sergio Busquets, quien actualmente, por sus características, no cuenta con un recambio en el banco de suplentes. Habrá que ver si el equipo londinense estaría dispuesto a realizar la operación para obtener a cambio al bosnio.
La otra posibilidad que la entidad culé ve con buenos ojos es la de Rodrigo Betancur, tal como indicó RAC1. Desde hace un tiempo, el ex Boca Juniors está en la mira de los azulgranas y ésta podría ser una oportunidad para ambas instituciones. Hasta el momento las conversaciones están paradas, pero la llegada del uruguayo de 23 años supondría la vuelta de Pjanic a un equipo que le calzaba como anillo al dedo.
Miralem Pjanic vería con buenos ojos cualquiera de las dos posibilidades de cara al periodo de transferencias que se abrirá a partir de junio de este año ya que no cuenta con los minutos que él pretende.
Con 31 años, el bosnio desea seguir luchando por títulos y sobre todo ser importante en un once titular, algo que no podría suceder en Barcelona, en donde lleva tan solo 1.275 minutos en 28 partidos y desde marzo que no juega ni un minuto.
A su vez, al Barcelona le serviría para reducir la masa salarial y adquirir un futbolista más acorde a las necesidades de Koeman. La opción de una venta directa también está sobre la mesa, pero estiman que no es conveniente porque, producto de la crisis financiera por el coronavirus, su precio estaría a la baja.
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