Este martes, el Barcelona empató ante el Levante y dejó en claro que no está preparado para ganar La Liga de España. El equipo azulgrana cometió todos los errores posibles e, se mostró timorato, sin ideas y no pudo superar a uno de los peores conjuntos del torneo, por lo que complicó sus chances de ser campeón. El Atlético de Madrid, de ganar el miércoles, le sacará cuatro unidades de ventaja.
El arranque del partido mostró a un cuadro visitante decidido a ganar. Con las líneas bien adelantadas y juego directo, acorraló a su rival desde el primer minuto y generó dos situaciones claras, una de ellas con Pedri de frente al arco sin oponentes en el área, pero no pudo romper el cero por errores en la definición y por una gran actuación del arquero local. Pero eso fue un espejísmo.
Esa ráfaga de agresividad no duró más que un puñado de minutos y para el primer cuarto de hora el equipo de Ronald Koeman ya había perdido la pelota, carecía de creatividad en ofensiva y no encontraba su mejor juego. A tal punto decayó su nivel que el Levante generó dos ocasiones claras de gol que no terminaron adentro del arco de Marc Ter Stegen por malas decisiones en el último instante de los delanteros del elenco local.
El marcador se rompió a los 26 minutos en un centro de Jordi Alba por la izquierda que tuvo un desvío en el camino y cayó perfecto en el segundo palo, para que Lionel Messi empalme la pelota de volea con una pirueta y grite el 1 a 0. El argentino llegó así a su gol 24 contra este rival en 23 enfrentamientos.
A partir de la ventaja, el Barcelona tomó confianza, mejoró su performance y encontró el segundo tanto. Ousmane Dembélé recuperó una pelota en el fondo y emprendió una corrida por derecha que incluyó una pared con Messi, que le devolvió un gran toque al vacío, un desborde y un centro atrás para que Pedri esta vez no falle y defina el 2-0.
En el complemento, el Levante pudo descontar a los 10 minutos ante la pasividad del cuadro blaugrana. Fue gracias a una jugada sencilla que incluyó un centro por la derecha de Miramón, quien pudo acomodarse sin presión alguna, para que Melero le gane en el punto de penal a Sergi Roberto, que había ingresado por Araújo en el entretiempo, y de cabeza grite el descuento.
En la siguiente acción, el local llegó al empate. Lionel Messi se equivocó en una salida de su equipo y en su intento por jugar rápido de espaldas le obsequió la pelota a José Luis Morales, quien tiró una pared con Roger Martí y definió de manera fantástica con una volea en la puerta del área que se metió en el segundo palo para el 2 a 2.
Por suerte para el Barcelona, apareció Dembélé a los 18 minutos del complemento para poner nuevamente en ventaja a su equipo al aprovechar el hueco por la derecha que dejó el cuadro local y definir en el área con un potente tiro cruzado que dejó sin opciones a Airton Fernández.
Pero el conjunto catalán volvió a pecar de exceso de confianza, como en casi todo el torneo. Dejó de presionar arriba, perdió verticalidad, falló en defensa y le dio ánimos al Levante, que pese a ser uno de los peores equipos del certamen empezó a generar oportunidades contra el arco de Ter Stegen. Por eso Koeman mandó a la cancha a Serginho Dest y a Braithwaite, pero ya era tarde.
El local gritó el empate cuando restaban seis minutos para el final en una subida por izquierda de Toño, que enganchó una y otra vez hasta encontrar el hueco y lanzar el centro ideal para que Sergio Leon anticipe a todos y estampe el 3 a 3.
Con este resultado el Barcelona dejó en el camino dos puntos clave en objetivo por conseguir título y probablemente se haya bajado definitivamente de la lucha. Todo dependerá de lo que hagan sus rivales en sus próximas presentaciones. El Atlético de Madrid jugará este martes ante la Real Sociedad, y de ganar le sacará cuatro puntos de ventaja con seis en juego, mientras que el Real hará lo propio el jueves contra el Granada en condición de visitante.
ESTADIO: Estadio Ciudad de Valencia
POSICIONES:
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