Después de seis años de idas y vueltas, se han conocido las fechas del juicio al futbolista francés Karim Benzema. La estrella del Real Madrid quedó envuelto en un escándalo de chantaje sexual a su colega Mathieu Valbuena, acusado de “complicidad en tentativa de chantaje” contra su ex compañero de la selección de Francia.
Benzema quien no juega en Les Bleus desde 2015 y quedó fuera del equipo que fue campeón del mundo, explotó al conocer que será juzgado del 20 al 22 de octubre por el tribunal de Versalles. El delantero del elenco dirigido por Zidane se arriesga a recibir una pena de hasta cinco años de prisión y 75.000 euros (USD 88.300) de multa en este caso, donde otras cuatro personas son también acusadas de tentativa de chantaje.
“Ya está, al fin, que la farsa se acabe para siempre”, escribió el atacante galo de de 33 años a través de storie de Instagram.
Esta escándalo estalló en octubre de 2015. La acusación se centra principalmente en una conversación de Benzema y Valbuena en Clairefontaine, el centro de entrenamiento de la selección francesa, donde el jugador del Real Madrid habría explicado poder “presentar a alguien de confianza” a su compañero, según la audición de este último, para ayudarle “a controlar” la posible publicación de un video íntimo suyo.
Todo nació unos meses antes cuando Valbuena cambió su teléfono móvil y confió en un hombre llamado Axel Angot, que también está entre los acusados, para que le transfiera sus archivos de un aparato a otro. Entre los documentos había un video sexual y quisieron chantajearlo a través de Karim Zenati, un amigo cercano a Benzema, quien intervino y quedó implicado.
Mathieu Valbuena, de 36 años, quien actualmente juega en el Olympiakos, dice que Benzema lo incitó a pagar unos 150.000 euros a los chantajistas para no hacer público el video sexual. Lo que la Justicia francesa deberá determinar es si en esa conversación hubo un consejo de amigo o a una presión delictiva. La Policía grabó un total de seis conversaciones telefónicas entre junio y octubre del 2015.
Hubo un tercer jugador implicado en este caso, el delantero Djibril Cissé, que también fue cuestionado en un determinado momento pero fue absuelto en enero. El caso se había cerrado por falta de pruebas, pero la aparición de nuevos indicios han provocado que se reabriera y ahora se conocerá el veredicto a finales de este año.
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