Es un escándalo que empezó a gestarse a mediados de 2015, pero las nuevas revelaciones han generado un gran repudio en toda España. Hace casi seis años, Ignacio Quereda renunció al cargo de seleccionador femenino de fútbol que ocupó durante 27 años por la presión ejercida por las propias futbolistas tras el Mundial de Canadá, donde no pasaron de la fase de grupos. Ahora se han conocido detalles del calvario que vivieron las jugadoras.
Aquella polémica salida de Quereda fue entre acusaciones de maltrato psicológico y abusos que ahora han quedado al descubierto en el libro “No las llames chicas, llámalas futbolistas” de la periodista Danae Boronat.
“Esta lo que necesita es que le metan una guindilla por el culo” y “A ti lo que te hace falta es un buen macho” son algunas de las frases que dijo este entrenador a sus pupilas. “Me pellizcaba el culo y me decía: ‘¿Tú sabes cómo fecundan los gallos a las gallinas?”, comentó otra de las víctimas, lo que refleja los repudiables modismos que tuvo este DT entre 1988 y 2015.
Todo ha quedado al descubierto en las últimas horas en este libro en el que se intenta explicar que significa ser mujer y futbolista, donde hay testimonios de grandes jugadoras españolas como Jenni Hermoso, Vicky Losada, Irene Paredes, Alexia Putellas, Vero Boquete, Aitana Bonmatí, Nahikari García o Marta Corredera.
La propia Corredera, actual jugadora del Real Madrid, describió uno de esos episodios desagradables con Quereda: “No puedo contar la de veces que venía y me levantaba la camiseta. ‘¡Quítate ese piercing, que provoca infecciones!’, me recriminaba. Entonces yo, cuando llegaba a la concentración, me tenía que quitar el piercing para decirle: ‘Ya no lo llevo, ya no me la levantes más’”.
El polémico Ignacio Quereda renunció a su cargo el 31 de julio de 2015 y fue sustituido por Jorge Vilda, quien venía de trabajar con las categorías sub-17 y sub-19, y actualmente sigue como seleccionador femenino de La Roja. Aunque en el comunicado que emitieron las jugadores se alegaba que la preparación del Mundial no había sido la correcta, algunas jugadoras ya habían dado indicios de que realmente había problemas de otra índole.
“Nos trata como niñas, no como a profesionales, que es lo que somos. Ya no se trata de fútbol sino de educación y respeto”, declaraba Vicky Losada, por entonces jugadora del Arsenal Ladies y actual mediocampista del Barça, al diario MARCA en 2015.
De hecho ya en los ‘90 se habían puesto de manifiesto algunas actitudes machistas que fueron ocultadas por la Federación que encabezaba en aquel entonces Ángel María Villar. Roser Serra, quien fuera portera del equipo nacional en la Eurocopa 1997, dijo que el seleccionador las maltrataba psicológicamente pero su denuncia pasó desapercibida para las autoridades del fútbol español.
SEGUIR LEYENDO: