En un partido en el que el Leeds de Marcelo Bielsa necesitaba sumar los tres puntos para recuperarse de su derrota ante Leicester en la jornada anterior, las cosas no comenzaron nada bien. El Crystal Palace tardó 12 minutos en ponerse en ventaja. Y como si el 1-0 en contra no fuera suficiente, al equipo del Loco le anularon un gol que parecía lícito a través del VAR.
Corría el minuto 16 cuando Patrick Bamford, el goleador inglés de 27 años que tiene Bielsa, corrió al espacio y definió sutilmente ante el achique del portero rival para marcar el empate parcial en este partido jugado en Selhurst Park (Londres) correspondiente a la Fecha 8 de la Premier League.
Mientras Bamford celebraba, el árbitro Chris Kavanagh recibía la advertencia de los Árbitros Asistentes de Video (VAR) de que la jugada sería revisada por un posible fuera de juego.
En la repetición se ve a un Bamford aparentemente en una posición lícita cuando partió el pase del polaco Mateusz Klich pero el colegiado decidió anular la anotación. Las imágenes muestran que el brazo del jugador estaba en offside pero reglamentariamente eso está permitido. Su hombro estaba en la misma línea que sus rivales y el resto de su cuerpo muy por detrás, por lo que todo indica que era un gol válido.
Para colmo, después de que el juez principal desestimó el tanto del Leeds, Las Águilas londinenses aumentaron la ventaja y el encuentro se le puso muy cuesta arriba al conjunto de Marcelo Bielsa, que finalmente terminó cayendo por 4-1 de visitante –el propio Bamford marcó el descuento– y agravó su pequeña crisis: ganó solamente uno de sus últimos cinco partidos en la liga inglesa.
Lógicamente que hubo quejas de todo tipo a través de las redes sociales, pero la más llamativa sin dudas fue la del empresario italiano Andrea Radrizzani, dueño del Leeds desde 2017, quien publicó en Twitter una imagen de la revisión del VAR con un emoji de encogimiento de hombros, claramente enojado por el fallo de los árbitros del partido.
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