Sergio Agüero no pisaba una cancha desde fines de junio, cuando sufrió una severa lesión en una de sus rodillas que lo obligó a estar parado casi cuatro meses. Este sábado, el Kun volvió a la actividad en la victoria del Manchester City por 1-0 ante el Arsenal por la quinta de la Premier League y se convirtió en uno de los protagonistas del encuentro no solo por su retorno futbolístico, sino por un gesto que tuvo hacia una jueza de línea del partido.
Iban 41 minutos del primer tiempo cuando Agüero le discutió una acción a Sian Massey-Ellis, la experimentada asistente encargada de controlar el ataque del City. Tras una vehemente queja, el delantero la tomó del hombro en una especia de sutil abrazo - entendido por muchos como un “agarrón”-. La árbitra inmediatamente, y con una evidente molestia, sacó el brazo del delantero argentino y siguió atenta a las acciones del juego.
Esta acción derivó en una gran polémica en torno de la conducta del Kun, que jugó 65 minutos (fue reemplazado por Ilkay Gündogan en la segunda parte). En las redes sociales, varios usuarios repudiaron la actitud que tuvo con la asistente femenina y pusieron en duda si el jugador hubiese actuado igual si el árbitro hubiera sido un varón. Otros, en tanto, lo vieron como una reacción normal por parte de un futbolista en medio de un encuentro.
De todos modos, el gran reclamo -más allá de si el gesto fue hacia una mujer o un varón- se centró en el hecho de que Agüero no recibió ningún tipo de sanción por lo que hizo. Cabe destacar que desde 2016 existe una normativa en el fútbol de Inglaterra que establece que el contacto físico con los árbitros será castigado con tarjeta amarilla o roja, de acuerdo a la gravedad que revista. Lo mismo sucede con los excesos verbales o las reacciones agresivas hacia los jueces.
Según consta en el sitio oficial de la Premier League, la tarjeta amarilla debe utilizarse cuando haya “contacto físico con cualquier oficial de partido de una manera no agresiva (por ejemplo, un enfoque inquisitivo para llamar la atención del árbitro)”, mientras que la roja es para el “contacto físico con los árbitros del partido de manera agresiva o de confrontación”. El caso el Kun podría ajustarse más a la primera definición y el error lo habría cometido el árbitro principal Chris Kavanagh por no haberlo amonestado.
“Esta medida se centrará en el comportamiento hacia los oficiales de los partidos, con el objetivo de reducir la conducta irrespetuosa como cuestionar las decisiones de manera agresiva o acercarse a corta distancia para confrontar a un oficial", comunicó la FA (Asociación de Fútbol) en el momento en que estableció la medida que tiene como fin proteger la integridad de árbitros principales y asistentes.
Richard Scudamore, presidente ejecutivo de la Premier League en el 2016, había explicado el origen de la decisión de castigar estas actitudes de los jugadores hacia los árbitros de manera más vehemente. “Junto a los clubes hemos estado discutiendo hace ya algún tiempo sobre algunas preocupaciones en torno a elementos del comportamiento de los jugadores que se están pasando de la raya. Tenemos una postura colectiva de no tolerar más este tipo de conductas”, había recalcado el dirigente.
En ese sentido, había agregado: “Son cosas que pasan en el momento, durante partidos de fútbol muy veloces y altamente competitivos. Queremos ver a los fanáticos apasionados y reclamando, pero los jugadores y los entrenadores deben ser conscientes de que hay líneas que no deberían cruzadas”.
En el caso del argentino, estos principios parecen no haberse aplicado, razón por la cual su gesto hacia la jueza de línea fue abordado por los medios de comunicación más importantes de Inglaterra una vez finalizado el partido. “Agüero se va sin castigo después de agarrar a la asistente Sian Massey-Ellis del hombro”, tituló The Sun, en tanto que Daily Star expuso: “El jugador del Manchester City Agüero es criticado después de poner su brazo sobre Sian Massey-Elli en el choque ante el Arsenal”.
Por el momento se desconoce si el Kun recibirá alguna sanción de oficio, dada la notoriedad que tomó el episodio una vez concluido el encuentro que se disputó en el Etihad Stadium.
Sian Massey-Ellis es una experimentada jueza de línea con una larga trayectoria en la Premier League, certamen en el que debutó en 2010). El año pasado, además, hizo su presentación a nivel continental en el fútbol masculino al integrar un equipo arbitral en un partido de Europa League. En la rama femenina, fue cuarta árbitra en el Mundial de China 2007 y jueza de línea en la Eurocopa 2017 y en el Mundial de Francia 2019.
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